Ficha técnica
José Manuel Díaz Patón deja en el aire su ruptura con Agatha Ruiz de la Prada: "eso lo tendrá que decir ella". El novio de Agatha agradece a la prensa que le hayan ayudado a mostrarse cómo es: "me habéis ayudado a remontar una situación que estaba muy mal. Pues estaba todo el mundo criticándome por ahí, ¿no? Es verdad, y ahora no. Y ahora parece que ahora soy una persona normal y corriente. Reconozco que vuestra ayuda ha sido fundamental para enseñarme cómo soy, que no soy ningún ogro". Aunque también se muestra crítico con los medios de comunicación: "cuando no se contesta o la gente no es simpática con vosotros, os metéis con ellos. Bueno, pues eso me ha obligado un poco a contestaros". Total José Manuel Díaz Patón: - ¿Qué tal señor Patón? Le he traído una tortillita con sus huevos. Enhorabuena por la calidad de sus huevos lo primero, gracias. Lo ha hecho un chef. Tengo un tenedor aquí. Señor Patón le tiene que poner nota a la tortilla a mi compañera. - Tiene muy buena pinta. - Mire, que le he traído un tenedor. El tenedor está limpio, eh. Patón probando sus propios huevos. ¿Qué nota le da? - Un 7. - Uy, que exigente señor Patón. Le faltaría la tortilla para llegar al 10. - Primero que estuviera recién hecha. - Hombre, si la acabamos de hacer en directo. - Sí, pero ¿hace cuándo? - Hace media horilla. ¿Se ha apagado la llamada? A las 4 de la tarde. ¿No se la quiere quedar así? ¿Por qué señor Patón? Ah, vale. Bueno, se la guardo. - Las tortillas no se pueden dejar de un día para otro. Porque sabes que los huevos te pueden generar un problema. - ¿Le gustaría ir a MasterChef Celebrity? - No lo sé. No lo he pensado. - ¿Le gustaría ir a MasterChef? - Sí. - Pero con sus huevos o del supermercado, los suyos de su campo. A ver, me da igual. Señor Patón, ¿sabe qué? - Hombre, los míos son más sanos. Señor Patón, ¿sabe qué nos han hecho? Porque sabes que no tienen nada que... Las gallinas... Las gallinas están por ahí. - ¿Le ha cocinado usted mucho? - Yo sí. - Señor Patón, ¿sabe qué? ¿Nos han hecho una canción? A usted y a mí. - Sí, la he oído. - Sí. Señor Patón, señor Patón. ¿Le ha gustado? - Me voy. Por favor, os pido, por favor, que me dejéis un poco en paz. - Claro, pero una pregunta rápida, señor Patón. ¿Por qué no ha acompañado a su querida Ágata hoy a Sevilla? - Que tengo mañana una cosa en el juzgado y tengo que trabajar. - Mucha suerte. - Que lo he preparado. Muchas gracias. - Que se rumorea que hay ruptura. Por eso no le han invitado a ir a Sevilla. - Eso lo tendrá que decir ella. - La columna de mañana de que va a ir.¿la columna de mañana es verdad que la va a dedicar a nuestra tortilla? - Sí, la columna se la va a dedicar a las tortillas La tribuna de Toledo, eso es casi. De Toledo, de Cuenca... - Señor Patón, ¿es cierto que venga a la isla de las tentaciones? - No - Con Ágata, ¿pero le gustaría? La isla de las tentaciones es un reto. Yo le veo a usted carne de reality, igual las tentaciones... - No, no, carne de reality. Esto se va a acabar el grupo por días. - ¿Por qué? No me diga eso, señor Patón. - Hombre, yo sigo con mi trabajo. - Mire, señor Patón, una cosa muy importante. El sábado día uno, nuestra colaboradora Leticia Requejo celebró su cumpleaños. ¿Podría venir? - Estoy fuera de Madrid. El fin de semana pasado se nos rompió, bueno, se rompió a mi hermano una máquina. - ¿De qué? Se la puedo arreglar si quiere. Pero, señor Patón, le repito lo del cumpleaños porque Leticia es súper defensora de Ágata, no es de las que la critican. Leticia está a tope. - Las cadenas que han criticado a Ágatha, desde luego yo no voy a hacer nada con ellas. Muy bien, señor Patón. - Pero Agatha ha hablado en Telecinco, entonces usted debería hablar en Telecinco como ella, ¿no? Señor Patón, yo creo que si Ágatha... - Yo no tengo ni categoría ni soy famoso. Me habéis hecho famoso en tres o cuatro días. - Usted ahora mismo es famosísimo y me lo debió un poquillo también a mí porque esa performance fue increíble. Empezamos queriendo que me quería denunciar y acabamos bailando. Patón, discúlpeme que no me había dado cuenta que nosotros tenemos en plató a Boris, que es súper amigo de Ágata. No sé si quiere mandarle algún mensaje, que Boris también habla súper bien de usted. - Boris es un diez de tío. Es cultísimo. El otro día vi una serie sobre Miguel Bosé y venía que Boris había intervenido en la... había sido el... ¡Oye, Boris! - Le han puesto nuestros compañeros. - Y ya me voy, ya me voy. Me voy a ver a mi madre, tiene 92 años y la veo todos los días. - Le han puesto el pinganillo al señor Patón ahora, los compañeros. - Boris, muchísimas gracias. Pero sé que...Pero, mira, te voy a decir una cosa, Boris. Tú es que me quieres mucho, pero te voy a mandar mañana mi artículo de la tribuna que te va a chiflar y te admiro, Boris. Te he visto en lo de Miguel Bosé, ¿sabes? En la serie de Miguel Bosé. Y bueno, me gusta mucho a Miguel Bosé porque le admiro muchísimo y me ha encantado cómo lo habéis hecho. Vamos a ver, sí. Bueno, ¿qué quieres que te diga? O sea, vamos, eres un genio. Muchas gracias a todos. Que no quiero ser una estrella ni nada, por favor. Yo mismo me digo Patón, para que vean que no, que me tocan las narices. Me río de mí mismo y me he reído siempre. Y me da igual. Gracias a vosotros. Chao. - Señor Patón, Lidia Lozano me dice que si le puede saludar, que se va a poner celosa también. - A Lidia, claro. - Ahí está, mira, ahí está. Señor Patón, en directo para ni que fuéramos. - Lidia es la primera para mí. - Y yo la segunda, ¿no? - Y tú la segunda. Pero Lidia es que la conoces muchos años. Y me acuerdo perfectamente de... Conozco a su marido, conozco todo. Y es una mujer encantadora, educadísima. ¿Eh? - Que si ha tenido usted algo con Lidia. No, no, es amor y amistad. - No, por Dios, ¿qué voy a tener? Además es que su marido es íntimo amigo. Vamos, ha estudiado la carrera y es amigo de un íntimo amigo mío que voy a recoger ahora para irme a... Primero voy a ir a ver a mi madre, que tiene 92 años. - ¿Su madre está contenta con su éxito? - Mi madre... Sí, le hace gracia, ¿no? Le da vidilla. Le da miedo un poco. - Sí, ¿porque se le sube a la cabeza a usted o qué? - A mí no se me sube, ya verá cómo no se me va a subir. Nada. Me está perjudicando desde el punto de vista de abogados. Lidia, que no te oigo. Sí, ahora. Ahora. Es que te oigo fatal. Sí, Marta, ya se va. Pero de verdad que... No, me habéis ayudado a remontar una situación que estaba muy mal. - ¡Ole, qué bonito lo que acaba de decir, señor patón! ¡Bravo! - Pues estaba todo el mundo criticándome por ahí, ¿no? Es verdad, y ahora no. Y ahora parece que ahora soy una persona normal y corriente. - Pues está muy bonito usted, eso es lo que ha dicho, patón. De verdad, te lo digo de verdad. - No, porque yo estoy aquí por eso. Si no, no hubiera contestado. Pero reconozco que vuestra ayuda ha sido fundamental para enseñarme cómo soy, que no soy ningún ogro. - Y ningún patán. Ningún... Bueno. Patán no eres, señor patón. - Alguna vez puedo meter la pata - No, pero bueno. - Todo el mundo mete la pata y me importa. Yo te digo que no me importa nada. Mira, no insulta a quien quiere, sino a quien puede. Ya. Entonces todos lo sabemos. Bueno, tengo que dejar que me están esperando. - Gracias por todo. Es usted un artista. - Marta, venga, adiós. - Te queremos. - Adiós, hasta luego. Gracias por todo, señor patón. Buena tarde. Adiós a vosotros. Ahí va el ídolo de la semana. ¡Bravo, señor patón! ¡Bravo! - Pues no soy ningún ídolo, por favor. Me da vergüenza. - Genial. Adiós, adiós. - Sí, señor patón. - Muy bien, pero yo necesito un poco de intimidad. ¿No os dais cuenta? - Y yo lo entiendo, pero esto no nos lo podría decir también en el plato, pues para que se entere todo el mundo. - No, no. O sea, me pilláis y no tengo más remedio que contestaros porque todo el mundo sabe que es una cosa que vosotros podéis decir. Cuando no se contesta o la gente no es simpática con vosotros, os metéis con ello. Bueno, pues eso me ha obligado un poco a contestaros. - Bueno, no con la gente no simpática, sino con la gente que nos trata bien. Usted nos ha tratado bien desde el primer momento. - Es una lucha que tiene que existir, como existen todas. Yo no digo que no, pero ya sabéis, ayer me persiguieron por la mochila. Bueno, pero... Yo creo que ya, a partir de ahora, ya se me ha ido cuando. Muy bien, pues me alegro mucho. Yo no puedo ver la televisión de esta zona porque estoy trabajando. Y trabajo, pues eso. Y esta mañana, alguien dijo que llegaban a las doce de la mañana ayer. Y le digo a esa persona que yo me levanto a las siete todos los días y cuando venía, venía de los juzgados. Y a veces voy con corbata y otras veces voy sin corbata, porque a mí me duele el pie, cómo voy. No hay que buscar tres pies al gato, hay que ser natural. - Muchas gracias Recursos de José Manuel Díaz Patón andando por la calle.
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