Ficha técnica
Eugenia Martínez de Irujo desmiente ser la madrina de su hermano: "no, que yo sepa, no. Pero bueno, que estamos todos muy contentos y ya tema de preparativos, gracias a dios, no sé nada. Porque no quiero ni saber." Cuenta que su madre no le daba consejos de como aguantar en la feria de sevilla: "mi madre no. No daba consejos. Solo se respiraba lo que ella vivía y entonces, al final, pues el gen es el gen." Recuerda como vivía la feria de Sevilla la Duquesa de Alba: "le encantaba. Le encantaba. Bailaba un montón. No se perdía una, en fin. Lo que ha sido siempre, imparable, ¿no? Porque es que..." Total Eugenia: - Qué guapa ¿Contenta de estar aquí? - Ganas tenemos. - ¡Un saludo para La Familia de la Tele que hemos empezado hoy, por favor! - ¡Hombre! Un saludo, un besazo a la familia de la tele. - Un bailote. - Y muchísima suerte. - ¿Qué significa estar aquí? - Un año más. - ¿Vais a bailar mucho? - Tradiciones y la feria que no me la quite nadie. - ¿Cuántos rebujitos se toma, Eugenia, en la feria de Sevilla? - No me gusta nada el rebujito. - ¿Qué es lo que toma? - Pues tomo o jerez o vino blanco. - ¿Y cómo está? ¿Qué significa estar aquí? - El rebujito me gusta nada. - Oye, Eugenia, ¿qué significa estar aquí? Hoy viene tu hija, un día muy importante. ¿Qué significa para ti ir a posar con ella? Estar aquí, una tradición tan especial para vuestra casa. - Bueno, no es la primera vez que posamos juntas, pero vamos. Siempre para mí es una alegría estar con ella, ya lo sabes. - ¿Cómo está, Ana? - Y además vengo vestida. Es su falda, ¿eh? - Es falda de tu hija, ¿no? A ver, date una vuelta que te veamos ahí, que la luzca. ¡Ole! - ¿Cómo está, Ana, para ti, Eugenia? - - ¿Cómo está Tana? - Sí. Pues feliz de la vida, la verdad. La verdad es que está muy contenta. - Y enamorada, ¿eh? - Bueno, ahora vendrá a preguntarle a ella, ¿eh? - Oye, Eugenia, ¿a ti te gusta...? ¿Cómo es que te haya dado tu madre para vivir la feria y aguantar todos los días de feria? ¿Cómo se tiene que aguantar? - Mi madre no. No daba consejos. Solo se respiraba lo que ella vivía y entonces, al final, pues el gen es el gen. - ¿Cómo era tu madre en la feria de Sevilla, Eugenia? ¿Cómo era la Gran Duquesa de Alba en la feria de Sevilla? - Le encantaba. Le encantaba. Bailaba un montón. No se perdía una, en fin. Lo que ha sido siempre, imparable, ¿no? Porque es que... - Oye, y lo más difícil de conseguir es, cuando te dicen, vente a mi caseta, es irte de donde está e intentar irte a la otra. ¿Hay algún truco para irse bien sin quedar mal? - - Bomba de humo. - Yo a la francesa siempre. Lo mejor es no despedirse de nadie. - Eugenia... No, espérate. La última, la última. Cayetano se casa. Imagino que feliz por tu hermano. - Súper feliz. - ¿Ahora hay buen rollo? ¿Cómo estáis? - Súper buen rollo. - - Eso no tengo ni idea. Eso preguntarles a ellos. - ¿Y tú vas a ser la madrina o no? - No, que yo sepa, no. Pero bueno, que estamos todos muy contentos y ya tema de preparativos, gracias a Dios, no sé nada. Porque no quiero ni saber. - Enamorado, ¿no? Enamorado tu hermano. -
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