Mario Vaquerizo, optimista, regresa a casa tras su dura caída

Mario Vaquerizo, optimista, regresa a casa tras su dura caída: "Podía haber sido peor porque tuve una caída bastante jodida y la verdad que esté vivo es guay porque o bien me podía haber matado o me podía haber quedado paralitico. Pero gracias a Dios yo creo que fue el cardado que llevaba que me paró el golpe". El cantante desvela que llegó a perder incluso la visión tras el accidente: "Lo he llevado bastante mal. Bueno, al principio no porque no recuerdo nada. Ya el día siguiente ya desperté en el hospital y me di cuenta porque me ha afectado también a la visión, he perdido un poquito de visión, pero bueno, eso es lógico del golpe". Vaquerizo asegura que no hubo ninguna falta de seguridad en el festival: "que el festival en el que actuamos reunía todas las características de seguridad y demás. Simplemente es que, como yo soy una mariquita inquieta, pues claro, lo que no puedo es estar girando y a la vez salir corriendo para irme para otro lado, tropecé". Mario explica la ausencia de Alaska en el hospital: "Olvidito la pobre estaba fuera, estaba en Venecia por un viaje, pero Marta me ha estado acompañando todo el rato" y agradece la preocupación que se ha generado por él: "agradecerles a todos los amigos, que no he contestado a nadie, a todos los medios de comunicación también, que tampoco he sabido que era una persona tan importante en este país con todo lo que está cayendo aquí". Total Mario Vaquerizo: - Contentos de verte - Esperar un momento que cuando me despierto me mareo. Todo bien gracias a Dios. Muchas gracias. Podía haber sido peor porque tuve una caída bastante jodida y la verdad que esté vivo es guay porque o bien me podía haber matado o me podía haber quedado paralitico. Pero gracias a Dios yo creo que fue el cardado que llevaba que me paró el golpe. - ¿El susto cómo lo has llevado? - Lo he llevado bastante mal. Bueno, al principio no porque no recuerdo nada. Una vez que me caí, yo cuando recuperé la conciencia, porque perdí el conocimiento, ya era en el camerino, y ahí no me di cuenta, no era consciente de lo que tenía, hasta que ya el día siguiente ya desperté en el hospital y me di cuenta porque me ha afectado también a la visión, he perdido un poquito de visión, pero bueno, eso es lógico del golpe. Y tengo que decir que he estado en muy buenas manos con todos los profesionales del Hospital Universitario de Cáceres, que me han cuidado como una reina. Estoy bastante dolorido, estoy un poquito agilipollado, pero bueno, estoy contento porque al fin y al cabo estoy hablando aquí con vosotros, os lo agradezco mucho. He estado muy bien acompañado por todas las Nancys, por mi hermana, que me ha estado ahí pendiente de mí todo el rato. Olvidito estaba fuera de España, querían venir, pero yo les dije que no, a mis padres tampoco, porque tampoco hacían nada en el hospital. Yo estaba allí y ya está. Los dolores son muy fuertes. Tengo dos fracturas en la vértebra, en la vértebra 3, no en la 4 y en la 6, que yo no sabía que teníamos tantas vértebras ahí. Y nada, y ahora es mucho reposo, mucha paciencia, que es lo que no tengo yo. Y nada, y que bueno, que esté aquí con vosotros y que muchísimas gracias. Y deseando ya meterme en mi casa. Y fíjate cómo estará mi cuerpo, que no tengo ganas ni de hablar. Pero bueno, considero que tengo que hablar y agradecerles a todos los amigos, que no he contestado a nadie, a todos los medios de comunicación también, que tampoco he sabido que era una persona tan importante en este país con todo lo que está cayendo aquí. Pero vamos, que muchísimas gracias, que está todo bien, que gracias a Dios y que tenemos unos médicos estupendos y que tenemos también a Dios, que una vez más me ha vuelto a proteger, porque sí es cierto que la caída no fue por imprudencia, fue un accidente. Estaba todo bien. También tengo que decir que el festival en el que actuamos reunía todas las características de seguridad y demás. Simplemente es que, como yo soy una mariquita inquieta, pues claro, lo que no puedo es estar girando y a la vez salir corriendo para irme para otro lado, tropecé y con muy mala... - Con esos tacones tan altos - Sí, con eso, hombre, claro, porque para subirte a una escena no tienes que ir bien vestido, ¿sabes, cariño? - Porque además la plataforma era la misma que habéis usado. - La misma que he utilizado en estos 20 conciertos y además este año teníamos 20 y pico conciertos hemos hecho y este era el último, en Hortelaria, y estábamos todos contentos, felices, un poco tristes porque terminaba la gira, pero bueno, lo importante es que podía haber sido peor y afortunadamente estamos aquí. - ¿Y qué compromisos que tengas que posponer, entonces? - Sí, yo ahora, bueno, pues tengo que dejar mis colaboraciones semanales en radio y en televisión, he pedido permiso para no ir e inmediatamente pues me lo han respetado, porque también para no estar bien, pues mejor, y me han pedido sobre todo el reposo, porque en el momento en el que estoy de pie, todo lo que es las vértebras y esto me deja baldado pero bueno, y ya está. - ¿Vas a ir a rehabilitación y esas cosas? - Sí hombre, claro que sí. Yo ahora tengo todo un protocolo de volverme a hacer tags, porque claro, las cabezas, me tuvieron que hacer un tag de la cabeza, un tag del cuello. Tengo que también estar mucho en el oftalmólogo para ver esa visión cómo se va recuperando poco a poco, que sí es cierto que he ido recuperando, pero al principio pues no veía del todo. Entonces estaba un poquito asustado, pero todo está bien y hay que pensar en positivo y ya está. Y que no queremos más dramas en nuestra vida, solo comedias entretenidas. Y que yo lo que quiero es cantar, bailar y ser feliz. - Que mejor compañía que de tu hermana - Pues sí, Martita. Olvidito la pobre estaba fuera, estaba en Venecia por un viaje, pero Marta me ha estado acompañando todo el rato, todos los amigos han estado, Ramsés también ha estado con nosotros aquí. Y después Las Nazis se tuvieron que volver porque tampoco hacían nada en el... No íbamos a ocupar el hospital, ¿sabes? Pero bueno, está ahí y ya está todo perfecto. - Hay rasguños veo, ¿no? También en los brazos. - Sí, demasiado. Aquí unos rasguñitos por aquí. Bueno, esto es solo de la vía. Y sobre todo lo que tengo es esto, que después ya me han dicho las chicas, las enfermeras, que me lo he pasado genial con las enfermeras, me han dicho que ya empezarán a salir lo que son todos los maratones y todo eso. Pero bueno, también me han salvado, me han dicho, también me han salvado el estar en forma, hacer mucho deporte, porque una caída así, si no controlas mucho y no tienes refortalecido mucho la espalda, de hacer gimnasia y demás, hubiera sido un poquito... te la podrías haber partido. Así que guay, pero chicos, que está todo perfecto y que muchísimas gracias. Y perdonadme que es que no me ha dado tiempo ni a peinarme, fíjate. - Nos alegramos mucho, Mario. - No, no, muchas gracias a vosotros. Hay mucha cuerda de Mario para rato, como se diga eso. Pero ahora es que, si me vais a perdonar, me voy porque es que me está entrando el dolor este. Imágenes de Mario Vaquerizo entrando en su casa ayudado por su hermana y amigos.