Ángel Cristo Jr y Ana Herminia llegan a casa tras su comentada boda

Ángel Cristo JR y Ana Herminia llegan a casa tras su comentada boda. El hijo de Bárbara Rey asegura que fue una boda familiar, a pesar de la sonada ausencia de su hermana y de su madre: "No, familiar porque nuestros amigos, seres queridos, son nuestra familia, al final. Familiar es que es una boda pequeña con la gente que queremos que esté". Confiesa que ha sido el enlace que soñaba: "Sí. Sí, he visto a toda la gente que quiero, que me quiere, que nos quiere. A la familia de ana, a mi familia. Muchos no han podido venir. No puede evitar reírse cuando le comentan que se ha admitido a trámite la demanda civil de tu madre en Marbella". Asegura que solo ha pensado en su mujer durante el enlace: "Yo en Ana. ¿En quién voy a pensar? Bueno, muy feliz. Además, Arturo tiene mi látigo". Reconoce lo guapa que iba vestida ana: "ay, sí, sí, sí. Han merecido la pena esos vestidos preciosos de verdad". Por su parte, la novia asegura que tiene lumbago tras la celebración del enlace: "No, es que me lesioné. Yo tengo las hernias y me lesioné un poquito". Explica que todo salió muy bien: "Todo precioso. Yo estoy muy contenta". Por el momento no celebrarán su luna de miel: "ahora no. Pronto, pronto, pero ahora no". Total Ana Herminia - Enhorabuena chicos, enhorabuena pareja. - Hola. - La boda soñada ¿no? - Tengo un lumbago que me muero. - ¿Qué has hecho esta noche? - He bailado mucho. - ¿Lo has dado todo? - Sí. ¿Qué tengo la espalda? - Pero bueno, pero Ana Herminia. - No, es que me lesioné. Yo tengo las hernias y me lesioné un poquito. ¿Qué tal chicas? ¿Cómo estáis? - Bueno, cuéntanos, ¿cómo ha ido la boda? ¿Qué tal? ¿Todo precioso? - Todo precioso. Yo estoy muy contenta. - ¿Tendréis luna de miel ahora? - Ahora no. Pronto, pronto, pero ahora no. - Bueno, han habido muchos guiños circenses por parte de la familia de Ángel ¿verdad? - No sé, ya lo verán. - Y la parte flamenca tuya, qué has querido hacer como un homenaje a España. - Pero estás más enterada que Ay, mira que bien. Chicas, que me tengo que ir a cambiar y eso ¿vale? Un besito, gracias. Total Ángel Cristo - Ángel, ¿qué tal ha ido la boda? - Fenomenal. Estamos muy felices. Todo bien y todo genial. - Estaban los que tenían que estar ¿no? - Claro, y todo el mundo. - ¿Y tu familia, la del circo, tan a gusto con ellos? - Claro. Familia. - ¿Era la boda que soñabas? - Sí. Sí, he visto a toda la gente que quiero, que me quiere, que nos quiere. A la familia de Ana, a mi familia. Muchos no han podido venir. - Fotos tuyas de pequeño, con tu padre. - ¿Eh? - Fotos también, ¿no? De tu infancia. - Ah, sí, mi prima. Sí, sí, sí. Es que ella tiene muchísimas. Es mi prima hermano. - ¿Te han regalado un látigo? - Bueno, es mi látigo, pero lo tenía guardado mi primo Jesúsín. Y él se lo quedó el recuerdo y al final me lo ha dado. ¿Cuántos? Treinta y... ¿qué? Treinta y tantos años después. - ¿Pensabas en alguien? ¿En quién pensabas mientras te casabas? - Yo en Ana. ¿En quién voy a pensar? Bueno, muy feliz. Además, Arturo tiene mi látigo. - ¿Te has emocionado mucho? - No me lo pierdas. - ¿Te has emocionado mucho durante la boda? - Sí. - Decía Jenny que eres muy sensible. - Sí, sí, pasa que con tanta gente... estás en una nube. - Entonces no va a haber luna ahora de miel, ¿no? - Sí, claro, pero en cuanto podamos. Tenemos que ir tranquilos. - Estaba justo en este momento hablando también un poco ahora que se había admitido a trámite la demanda civil de tu madre en Marbella. No sé si sabes algo. Vas a estar a otra cosa supongo ahora. - (Gesto y risas) - Bueno, que tienes muchos regalos, ¿no? - No, no son regalos. Son vestidos y cosas. - ¿Cuál es el momento que más recuerdas con cariño de la boda? - Yo sé que pasa todo muy rápido como una nube cuando te casas, pero ¿qué es lo que más recuerdas? - La ceremonia. - Muy emotiva. - Sí. - Oye, no sé si todavía podéis estar en ese momento en el que busquéis un hijo en común. - Si fuéramos más jóvenes, seguro. Tenemos ya dos. A tu niña le diste... Bueno, a los niños le habéis dado protagonismo, ¿no? - Claro. - Han tenido su momento. - Sí, ya lo verán todo. - Oye, vestida de novia tan guapa, ¿no? Que decían que iba guapísima con los dos vestidos, Ana. - Ay, sí, sí, sí. Han merecido la pena esos vestidos preciosos de verdad. - Gracias. Muchas gracias y bueno, pues nada. Felicidades. Enhorabuena y bueno. - Nada, gracias. De verdad, estamos muy contentos. Solo estoy un poquito cansado. - ¿Qué os han dicho los amigos? - Porque al final, la boda es la boda. - Sí. - Y estás pendiente de la novia, de los amigos, de los familiares. Entonces, al final, no comí nada. - Ya. - Ni bebí nada. Entonces, al final, pues... Pero cansados porque nos hemos acostado muy tarde y hemos dormido muy poco. - Oye, al final, tus amigos de programa, muy bien contigo. Todos han dicho que fenomenal tu boda. Se la han pasado genial. - Sí, es una boda familiar. No es ninguna boda ostentosa, no, es una boda con nuestros seres queridos. - Bueno, claro, eso es un poco pullita lo de boda familiar, a lo mejor. - No, familiar porque nuestros amigos, seres queridos, son nuestra familia, al final. Familiar es que es una boda pequeña con la gente que queremos que esté. - Pues me alegro mucho que la paséis también. - Bueno, gracias. - Gracias. - Gracias. Hasta luego.