Ficha técnica
Eva González sorprende cuando le preguntan por cómo le cae su ex marido, Cayetano Rivera: "Cayetano es el padre de mi hijo y es una persona a la que adoro, a la que quiero, con la que formé una familia y a la que le deseo la mayor felicidad del mundo, porque cuanto más feliz esté él, más feliz va a estar mi hijo, que es lo que a mí me importa realmente. Y lo vamos a ser siempre, por supuesto que sí". Si le preguntan por la que era su sobrina Tana rivera, comenta: "hoy es el cumpleaños de Tana, sí, sí, sí. Bueno, que yo a Tana la adoro, hija mía, mi ratona, ¿qué te voy a decir? La quiero muchísimo". Además solo tiene palabras de cariño hacia ella: "es una mujer con un carácter especial, con un carisma impresionante, bella por fuera, por dentro y es un tesoro de mujer, yo la adoro". Sobre si ahora se ha vuelto mucho más exigente en el amor, Eva confiesa: "no sé si más exigente o no, lo que sí que es verdad que como tengo muchas áreas de mi vida muy completas, pues a lo mejor no me hace tanta falta, ¿no?, entre comillas, como cuando uno es más joven y siente esos amores de juventud. Date cuenta que llevo casi media vida con el mismo hombre". A pesar de esto deja claro que no está cerrada al amor: "tampoco es que sea algo que voy buscando, porque ya te digo, estoy muy plena, muy tranquila, muy feliz, muy serena. Si llega, llega, claro, pero no es algo que yo voy buscando, encarecidamente, porque de verdad que te digo que me siento plena, me siento feliz, me siento cubierta en todos los aspectos de mi vida, con un amor enorme, tanto de mi familia como de mis amigos, el amor por mi trabajo, el amor que mis compañeros me dan, el de mi hijo, o sea, de verdad". Total Eva González: - ¿Qué tal? ¿Cómo estáis? - Bueno, no tan bien como tú, que el día de hoy estás espectacular, porque el día de hoy lo requiere. - Bueno, el día de hoy para mí, como cada año, es muy importante. Ya sabéis que desde el principio soy la presentadora del festival, y para mí es un día, aparte de muy emotivo, un día de reencuentro con gente a la que quiero mucho y un día para recordar cada año. Muchas ganas de que lleguase el día. - ¿Qué significa para ti estar aquí presentando y alzando también la voz? Porque muchas veces poca gente se atreve a alzar la voz a esta maldita palabra que se llama salud. - Bueno, yo creo que sí que mucha gente se atreve a alzar la voz, porque por eso precisamente una revista como él está aquí alzando la voz en nombre de toda la gente, tanto de investigación, como de prevención, como de enfermos, como de familiares. Yo creo que no, que mucha gente alza la voz y lo mío no es más que un granito de arena entre un millón, millones que hay. - ¿Qué importante es para la enfermedad cogerla a tiempo? - Sí, la prevención. La prevención es muy importante. Me gustaría que todas, cada una de nosotras, no dejas pasar nunca. Mañana voy, el mes que viene voy, ahora no tengo tiempo, tengo que ir a hacer la compra, es que tengo que ir a no sé dónde, no, no tenemos nada más importante que hacer que curarnos y cuidarnos. - ¿Tu has tenido algún susto? - No, gracias a Dios no he tenido ningún susto, porque ya te digo, soy bastante, con mis revisiones, que en cualquiera, evidentemente, cualquier revisión puede aparecer, pero yo en mis revisiones se ve bastante constante y no dejo pasarlo. De hecho, siempre, las tengo ahora, en esta época. Sí, porque como se empieza a hablar del cáncer de mama, no sé qué, no sé cuánto, ya lo tengo puesto aquí porque así no se me pasa. Además, tengo un ginecólogo maravilloso, que se llama Antonio Artura, que me recuerda cada año. - entro de nada es tu cumpleaños. - Pues mira, justo el día de mi cumpleaños, grabo La Voz, o sea que me toca celebrarlo, me toca hacer La Voz, me toca trabajarlo ese día, pero no me importa, porque para mí el trabajo... - ¿Qué significa para ti cumplir años? ¿En qué momento de tu vida te encuentras? - Estoy feliz, estoy tranquila, estoy serena, estoy en paz, estoy cuidando de mi niño y de mí misma, que creo que es lo más importante, y volcada en mi trabajo, en mi familia, en mis amigos, y en el amor más importante que tengo del mundo, que es el de mi hijo. - ¿Es el hombre más importante de tu vida? - Sí, sí. No, no es el hombre de mi vida, es el niño de mi vida. De momento es el niño de mi vida. - ¿Quieres tener algún día el hombre de tu vida? ¿Si viene, viene? ¿O te cierras? - No, no, cerrarme, no, por supuesto que no. Tampoco es que sea algo que voy buscando, porque ya te digo, estoy muy plena, muy tranquila, muy feliz, muy serena. Si llega, llega, claro, pero no es algo que yo voy buscando, encarecidamente, porque de verdad que te digo que me siento plena, me siento feliz, me siento cubierta en todos los aspectos de mi vida, con un amor enorme, tanto de mi familia como de mis amigos, el amor por mi trabajo, el amor que mis compañeros me dan, el de mi hijo, o sea, de verdad. - Eres muy exigente como presentadora, ¿te gusta que salgan las cosas bien? También para los hombres, ¿eres ahora más exigente después de una...? - ¿Después de qué? ¿Después de qué? - Está bien, está bien, para que no te enfades. - ¿Pero cómo me voy a enfadar yo por eso? No sé si más exigente o no, lo que sí que es verdad que como tengo muchas áreas de mi vida muy completas, pues a lo mejor no me hace tanta falta, ¿no?, entre comillas, como cuando uno es más joven y siente esos amores de juventud. Date cuenta que llevo casi media vida con el mismo hombre, entonces ahora mismo... - ¿Te sigue cayendo bien Cayetano? - Cayetano es el padre de mi hijo y es una persona a la que adoro, a la que quiero, con la que formé una familia y a la que le deseo la mayor felicidad del mundo, porque cuanto más feliz esté él, más feliz va a estar mi hijo, que es lo que a mí me importa realmente. Y lo vamos a ser siempre, por supuesto que sí, claro que sí. - Cumpleaños de Tana. - hoy, hoy es el cumpleaños de Tana, sí, sí, sí. Bueno, que yo a Tana la adoro, hija mía, mi ratona, ¿qué te voy a decir? La quiero muchísimo. - Van creciendo. - Es una mujer con un carácter especial, con un carisma impresionante, bella por fuera, por dentro y es un tesoro de mujer, yo la adoro. - ¿Otra vez, otro primito más? - Otra, vez, otro primito más. - Buen cuñado, ¿no? - Claro, siempre.
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