Gabriela Guillén sobre su relación con el padre de su hijo: "una relación cordial"

Ficha técnica


Fecha 27/09/2024
Parte 1
Duración 00:04:56
Sonido Totales y Ambiente
Edición Editado
Localización Madrid
Firma Europa Press

Gabriela Guillén sobre su relación con el padre de su hijo, comenta: "bueno, una relación cordial". Explica que su única compañía actualmente es su hijo: "me toca. Todo lo que hago me toca hacerlo sola. Así que, nada". Gabriela salía de la clínica donde se ha sometido a una bichectomía: lo que pasa es que tengo la cara muy fina y normalmente es que yo siempre me veo como enfrente, me hago una foto, hay muchas fotos y me veo como la cara muy plana, entonces tenía ese complejo". Asegura que es la primera vez que se hace un retoque estético: "no, no, no, los labios son míos. Me he hecho una bichectomía, que son las bolas de bichá, que son unas grasitas que están... Es la primera vez que me hago algo en la cara, bueno, no es en la cara, pero es una grasita que es de nada". Recién terminada la cirugía, Gabriela revela cómo se encuentra: "estoy hinchadísima. Si no puedo ni hablar, tengo la anestesia todavía. Me habéis pillado ahora mismo al salir. Así que estoy hasta mareada". Confiesa que está inmersa en un nuevo proyecto laboral: "estoy ahora mismo en un proyecto. Estoy como en stand-by porque estamos abriendo un centro de estética que ya luego os enteraréis todos dentro de nada. Y nada, estoy trabajando mucho en ello. Más a nivel interno. Pero sí, estoy muy contenta y también estresada porque son muchas cosas. Una empresa lleva muchas cosas". Explica que se trata de un centro estético: "sí, es un centro que con una socia vamos a abrir en el barrio de Salamanca. Ya os diré detalles, ya os enteraréis seguramente". Asegura que por nada en el mundo sería Bertín Osborne imagen de su negocio: "no, no, para nada. Será mi hijo, pero bertín no, lo siento. No, no, no. Bueno, si quiere ir, estará invitado. Si quiere ir estará invitado si quiere ir. Él está enterado de que lo voy a abrir, así que". Este tema es en exclusiva. Total Gabriela Guillén: - ¿Qué te ha pasado? ¿Pero qué te han hecho? ¿Es de la cara entonces? - No, lo veis, estoy hinchada, es que no puedo ni hablar. - O sea que te ha retocado los labios, ¿no? - No, no, no, los labios son míos. Me he hecho una bichectomía, que son las bolas de bichá, que son unas grasitas que están... Es la primera vez que me hago algo en la cara, bueno, no es en la cara, pero es una grasita que es de nada. - ¿Querías afinarte un poco en la cara, que es lo que suele hacer la gente? - Sí, era una cosa que tenía ahí pendiente y nada, me he animado a hacerlo por fin. No puedo ni hablar, tengo la anestesia, ¿me habéis pillado? - Claro, ha sido el momento, te lo han hecho ahora y sales hoy el día. Ha sido media hora. - ¿No te veías suficientemente bien, Gabriela? - No, sí, no, lo que pasa es que tengo la cara muy fina y normalmente es que yo siempre me veo como enfrente, me hago una foto, hay muchas fotos y me veo como la cara muy plana, entonces tenía ese complejo. - ¿Y cómo tienes que recuperar ahora? - Pues tengo que estar en casita, recuperándome, tomando cosas frías y eso es como algo del dentista. - Pero ¿cuándo se va a empezar a notar? Ahora mismo está un poco inflamado. - Estoy hinchadísima. Si no puedo ni hablar, tengo la anestesia todavía. Me habéis pillado ahora mismo al salir. Así que estoy hasta mareada. - ¿Tienes alguna otra cosa prevista? - No, no, no. Yo no soy de hacerme nada. No llevo botox, no llevo absolutamente nada. Nunca me he hecho nada. Ahora, mira, me he animado a esto. Cuando se entere mi madre, me va a matar. - Yo pensaba que a lo mejor después de dar pecho, esas cosas que se caen, a lo mejor podría haber tenido algo que ver lo de la operación tuya con eso. - No, no, no, no, no. Qué va. Qué va. No, no. De momento estoy conforme como estoy. Pero sí que es algo que tenía previsto hace mucho. A ver si me cojo un taxi. - ¿Sigue saliendo trabajo? O sea, estás contenta con tu trabajo. - Estoy ahora mismo en un proyecto. Estoy como en stand-by porque estamos abriendo un centro de estética que ya luego os enteraréis todos dentro de nada. Y nada, estoy trabajando mucho en ello. Más a nivel interno. Pero sí, estoy muy contenta y también estresada porque son muchas cosas. Una empresa lleva muchas cosas. - Va a ser como un centro tuyo o algo así, entiendo. - Sí, es un centro que con una socia vamos a abrir en el barrio de Salamanca. Ya os diré detalles, ya os enteraréis seguramente. - Es de estética, entiendo. - Es de estética, sí. De tratamientos estéticos, sí. Así que nada. - Algo más que decir que nos tengas que contar. ¿Podría ser la imagen de Bertín? - No, no, para nada. Será mi hijo, pero Bertín no, lo siento. No, no, no. Bueno, si quiere ir, estará invitado. Si quiere ir estará invitado si quiere ir. Él está enterado de que lo voy a abrir, así que... - Claro, sí, sí, porque ahora ya entiendo que hay una relación más fluida. Entiendo un poco. - Bueno, una relación cordial. - De acuerdo. Bueno, pues vamos a dejar que estás fatal, que no... - No, claro, es que me vais a sacar la cara así de hinchada. - No se te nota mucho, ¿eh? O sea, lo que pasa es que... Claro, entiendo que se te notará después. - Sí, esto se nota a partir de los seis meses o así. - Claro. - O sea, todavía... - Antes, pero es verdad que ahora mismo no se te nota. Pero tampoco tienes ni morado ni nada, ¿eh? - No, espero que no tenga morado, no sé. Es una intervención muy pequeña, o sea, son dos bolitas de grasa que tenemos todo el mundo que no tienen ninguna función. Entonces, no es algo... Es algo más estético cuando te ves, pero es muy imperceptible, o sea, no se nota mucho. - De hecho, has podido venir sola, cosa que me sorprende que no has necesitado compañía. - Claro, no puedo traer al niño. Yo vivo con mi hijo y, bueno, me cuida una persona, pero es que, claro, no lo puedo traer. - Se queda con el niño imagino. - Me toca. Todo lo que hago me toca hacerlo sola. Así que, nada. Pues ya os contaré lo de... Y ya seguramente veréis. Ya en octubre lo quiero inaugurar, así que ya estaré por ahí. En breve. Ya estarán muchas invitaciones. Hay también gente muy importante para mí. Y ya os contaré más cositas. - Que te recuperes prontito. No sé si vas a poder comer hoy. - No, pero bueno, viene mejor. No hay mal que por bien no venga. Así bajo un poquito. - Vale, muchas gracias. Este tema es en exclusiva

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