Paz Padilla se presta voluntaria para cuidar de Bertín Osborne hasta que se recupere

Paz Padilla se presta voluntaria para cuidar de Bertín Osborne hasta que se recupere: "Solo que sea feliz, que se recupere y que en mi casa tenga una cama de dos metros por dos, que él cabe" "Mi Bertín, por favor, me lo llevo a mi casa y le doy una sopita. Y lo cuido mucho, mi niño, que lo quiero mucho. Por Dios que esté bien". Recuerda que ella ha vivido en primera persona los problemas de voz: "estoy operada dos veces de nódulo. Nuestra profesión, muchas veces actuamos en lugares donde acústicamente no está bien y forzamos las cuerdas sin querer" "cuando nos falla, pues, fíjate, para nosotros es terrible. Es terrible y muchas veces, pues, es muy difícil" "desde aquí apoyo a él y a todos los compañeros que trabajamos de la voz". Sobre la paternidad del hijo de Gabriela Guillén: "es que no sé qué piensa de esto, yo no lo he hablado. Es que no sé si él, yo solo sé que él con sus hijas, es un padrastro, y con sus hijos también" "él ejerce, es padre. Ah, no lo sé, es que yo esta historia no la he vivido, no lo sé, no he hablado con él". Le manda sus ánimos a Carmen Borrego y confía en que se reconcilie con José María Almoguera: "Llegará su momento en el que ellos se sentarán, arreglarán sus cosas, y yo qué sé, es que me falta información. Que se quieran, yo siempre digo que se quieran, que arreglen las cosas" "yo le digo que yo la quiero mucho, que le vaya todo muy bien". Le dedica unas bonitas palabras a Jimmy Giménez-Arnau: "es una gran pérdida. Y desde aquí mando un beso muy fuerte a su mujer, que ya me dicen que está la pobre, bueno, pues muy afectada y que estas cosas son así, que hay que... ¡qué cuesta!" "Era, pues, era un transgresor, un provocador, un sarcástico, un irónico, un showman, era todo, era un poco de todo. Muy divertido, era un tío muy culto, muy preparado, lo que dice todo el mundo de él, cuando todo el mundo dice lo mismo es por eso, es porque lo es". Total Paz Padilla: - El rojo me favorece, aparte que es precioso el vestido. - ¿Pero tú sueles a llevar mucho rojo? - Sí, sí, sí, sobre todo fin de año. - Ya lo sabes, ya sabes que te favorece y dices. - Yo ya, treinta años de profesión, ya sabemos lo que nos favorece y lo que no. Y si no, te voy a dar un truco: te vas a un gran centro comercial donde haya muchos pañuelos. Y ahora te vas poniendo uno y te vas mirando al espejo. Inmediatamente sabes cuál te favorece. - Estamos hablando hoy de este aniversario. ¿Cuál ha sido la portada de tu vida? ¿Cuál ha sido la más icónica o la que más te haya gustado? - Sinceramente me encantan las portadas de los extranjeros, de esas casa. Además que esas sí que las veo. Quiero decir, ¿y esta quién es? La marquesa de no sé qué, de no sé cuánto. Y lo que veo es las casas. Yo digo, ¡qué cosas tan bonitas! Y digo, ¿cómo puede vivir la gente ahí? Se perderán. Hoy, como para limpiar esas casas, me encanta. Son las revistas de glamour, me encanta. - Hoy hablando de periodistas, bueno, de colaboradores icónicos. Hoy hemos tenido la noticia del fallecimiento de Jimmy, que me imagino que habrás coincidido con él innumerables veces. - Sí, trabajaba como colaborador en el Sálvame, luego en el Sálvame Deluxe, y bueno, pues eso es una gran pérdida. Y desde aquí mando un beso muy fuerte a su mujer, que ya me dicen que está la pobre, bueno, pues muy afectada y que estas cosas son así, que hay que... ¡qué cuesta! - ¿Con qué te quedabas de Jimmy? ¿Qué es lo que era? - Era, pues, era un transgresor, un provocador, un sarcástico, un irónico, un showman, era todo, era un poco de todo. Muy divertido, era un tío muy culto, muy preparado, lo que dice todo el mundo de él, cuando todo el mundo dice lo mismo es por eso, es porque lo es. - Pero todo el mundo dice sobre todo que es que es un hombre que ha vivido como ha querido. - Pues la verdad que eso es lo que yo digo, la vida es eso, lo que has vivido no es lo que te queda por vivir. Entonces si ha tenido una buena vida, pues mira, recordarlo con amor, con agradecimiento y desearle un buen viaje. Sí, verdad. A todos nos va a llegar, así que ojalá todo el mundo nos recuerde así, con ese buen sabor de boca. Dejar un buen legado, yo creo que es lo que más preocupa. Dejar un buen legado y dejar amor. Señal que se ha hecho bien. - Tus excompañeros de Sálvame. Bueno, no sé si Carmen, Carmen Borrego. No sé si has tenido oportunidad de hablar con ella, si sabes cómo se encuentra con todo el lío este de su hijo, que le está metiendo una - Que yo estoy con mi empresa, con No ni ná, haciendo teatro en Barcelona, con El Humor de mi Vida, tercera temporada. Estoy con El Libro Mal, o sea que tengo tantas cosas en la cabeza que ya me desvinculé un poco del mundo del corazón. Entonces ya no sigo las tramas, la verdad. - Pero le apoyas de vez en cuando. - No, yo le digo que yo la quiero mucho, que le vaya todo muy bien. Es verdad que cuando hemos coincidido por Telecinco, cómo estás a Carmen y le das achuchones. Pero no os pregunto estos temas, porque yo he estado 14 años así, y sé que esto es hoy, y mañana será otra cosa, y pasado será otra cosa, y lo que parece tan terrible ya mañana no lo es. O sea, que no terribilicemos, como dice Andreu, ¿sabes? Rafael Santana. - Por ser hijo contra la madre, me refiero. O sea, que eso es lo terrible de la cosa. Lo que sé que tú propias... - Todo eso ya lo hemos vivido tantas veces Llegará su momento en el que ellos se sentarán, arreglarán sus cosas, y yo qué sé, es que me falta información. Que se quieran, yo siempre digo que se quieran, que arreglen las cosas. - Pero tú tienes una hija maravillosa. - Yo creo que... pero yo qué sé, la vida es así. - Además, hija y socia, porque también te apoya mucho en tu... - Sí, ahí estamos las dos creando historias, la No ni ná que va para arriba, queremos montar tienda en Madrid, o sea, que estamos súper felices. Ahora que estamos en la Nonineta en Delicias, en el festival aquí de la fiesta, siempre estamos currando. Muy bonito. - ¿Cuál es el ciclo de tu vida ahora, Paz? Que te vemos más tranquila, más en otro rollo. - Pues fíjate, estoy que voy a empezar un... estoy haciendo un máster que ya me queda muy poquito de coach, voy a hacer coach en una semana, ya termino. Empiezo otro máster de neurociencia, psicología positiva, mindfullness, estoy dando conferencias... Quiero convertirme en una escalera para ayudar a gente que lo está pasando mal. Con mi experiencia, como dice Santa Teresa de Jesús: solo hablaré de aquello que he vivido una vez o varias, ¿no? O sea, yo no quiero ser maestra de nada, pero sí que hay gente que lo está pasando mal y yo puedo ayudar. - Sabemos de Bertín que parece que arrastra todavía lo del COVID, que está pendiente de sacar disco, depende de si le funciona su instrumento... - Mi Bertín, por favor, me lo llevo a mi casa y le doy una sopita. Y lo cuido mucho, mi niño, que lo quiero mucho. Por Dios que esté bien. O sea, ¿sabes qué pasa? Que yo, por ejemplo, ahora, estoy haciendo teatro, estoy operada dos veces de nódulo. Nuestra profesión, muchas veces actuamos en lugares donde acústicamente no está bien y forzamos las cuerdas sin querer y eso que yo voy con un ortofonista, que doy clases y tal, pero es nuestra herramienta de trabajo. Entonces, cuando nos falla, pues, fíjate, para nosotros es terrible. Es terrible y muchas veces, pues, es muy difícil. Determinadas horas, yo, por ejemplo, que hubo otro día en el teatro una obra de dos horas, pues, acabo afectando mi voz. O sea, que desde aquí apoyo a él y a todos los compañeros que trabajamos de la voz. - ¿Y tú crees ahora que se está hablando que sí, el niño, que se lo ha amortizado, que no lo ha amortizado? ¿Tú crees que él iría al bautizo? ¿Crees que en un futuro, en diciembre tienen el juicio ya de la paternidad, crees que en un futuro, conociéndole a él, daría un paso? - Porque yo con Bertín, es que no sé qué piensa de esto, yo no lo he hablado. Es que no sé si él, yo solo sé que él con sus hijas, es un padrastro, y con sus hijos también. Y yo sé que él... Pero no lo sé, es que no puedo ser más. Yo solo quiero que esté bien, que sea feliz, que todo el mundo sea feliz. - ¿Te lo imaginas ejerciendo, simplemente, te lo imaginas? - Sí, a ver, él ejerce, es padre. Ah, no lo sé, es que yo esta historia no la he vivido, no lo sé, no he hablado con él. Me sería aventurar una historia que no controlo, lo siento, lo siento. Solo que sea feliz, que se recupere y que en mi casa tenga una cama de dos metros por dos, que él cabe. - ¿Para compartir? - No, para cuidarlo, quiero decir, para cuidarlo. O no estará para muchos trotes. - Está de muy buen ver. - Oye, mira, de verdad, yo no veo un tío que sea tan guapo y tan atractivo. Yo sé, de verdad, es que es un tiarrón. - Sí, sí, sí. Bueno, muchísimas gracias. - Os quiero, adiós.