Ion Aramendi se pronuncia sobre la actitud de Rodolfo Sancho tras la de su hijo

Ion Aramendi empatiza con el dolor de Rodolfo Sancho: "Como padre, yo sufriría un montón por lo que sucedió, por lo que ha tenido que vivir y por lo que están viviendo. Como padre, imagínate, el dolor es increíble de ver que un hijo tuyo está en la cárcel, de que ha sido condenado por un delito terrible. Bueno, un horror, tío, un horror". Al preguntarle si participaría en un reality junto a Maite Galdeano, responde: "Hay leyendas, leyendas de la vida. Maite... ostras. Yo hubiera flipado, me hubiera reído mucho, pero también yo creo que, no sé, le hubiera hecho algo". Defiende lo buena profesional que fue siempre Aída Nízar cuando coincidió con ella: "ella tenía las narices ya. A veces había gente que no le quedaba muy bien y la tía con sus dos narices es muy valiente en ese sentido. Es decir, que también hay que valorar eso". Ion Aramendi se prepara para la próxima edición de Gran Hermano y reconoce a Mercedes Milá como su referente: "Sí, hombre, Mercedes. Para mí es un referente. Además, también tengo una relación maravillosa personal con ella" "me dijo: Tú eres muy bueno, y a mí eso, o sea, de las cosas que me llevo en mi vida, que me dijera Mercedes Milá un día, dice: tú eres muy bueno. Yo digo: pues si yo era un reportero de mierda, pues tío, me lo dijo, y a mí eso me llenó de orgullo un montón, y yo le tengo mucho aprecio". Da su enhorabuena y su apoyo a sus antiguos compañeros: "Hombre, yo les tengo un cariño increíble y les deseo lo mejor siempre. A María, a Belén, a Kiko, a los Kikos, a todos. Me parece que son de los mejores, si no los mejores colaboradores que hay en la televisión para hablar de lo que hablan. Y, además, son tíos estupendos. Son profesionales como la copa de un pino y conmigo han sido compañeros maravillosos. A todos ellos, un abrazo gigante". Confía en poder presentar las campanadas de fin de año: "El sueño de cualquiera que se dedique a la tele, presentar telediarios o presentar las campanadas". Total Ion Aramendi: - Ion, vuelve Gran Hermano. - ¡Vuelve GH! Vamos, GH Anónimo, que es el que a mí me flipa y me fascina. O sea, para mí ha sido siempre el mejor programa de la televisión. Yo he sido fanático desde la primera edición. Veíamos el 24 horas en mi casa y vuelve esa edición. Entonces, no sé absolutamente nada. No conozco a nadie del casting ni quiero conocerlo. No pregunto nada. Quiero descubrirlo como espectador el próximo jueves. - ¿Qué ha sido trabajar con Jorge nuevamente? - Ah, tío, estamos encantados. Es que Jorge está en un momento profesional increíble, de verdad. En el diario está increíble. Tío, es un amor. Aparte, tenemos ya mucha confianza. De muchos años desde el Sálvame llevamos ya casi 15 años juntos y además tenemos una relación personal extraordinaria. Y está en tan buen momento que yo me subo rápido a él. Estoy muy contento, sí. Yo estoy súper feliz, en un momento profesional y personal increíble. No me puedo quejar de nada, que me quede como estoy. Soy felicísimo. Y mientras siga trabajando y mis hijos sigan bien, todo lo demás me da igual. - ¿Cuándo crees que el público va a coger a este Gran Hermano? - Pues tengo... No sé, yo estoy ilusionadísimo. Quiero pensar que los demás también. Mira, creo que todo es cíclico en la tele, y hay ciclos maravillosos de cosas muy interesantes. Hay ciclos donde el famoso copa prácticamente todos los programas, los concursos, los realities, todo. Y hay un momento también para la gente de la calle, creo que es el momento de la gente de la calle. El diario de Jorge lo demuestra, es decir, las historias de la gente te interesan. A mí me apetece conocer a la gente, y gente que no conozca de nada. - Oye, sigue... - Conozco a todo el mundo, ya estoy harto. - Sigue estando también la esencia de Mercedes Milá. - Sí, hombre, Mercedes. Para mí es un referente. Además, también tengo una relación maravillosa personal con ella. Mi mujer trabajó muchos años en Gran Hermano, y con ella hemos tenido siempre una relación especial. A mí me apoyó cuando yo era reportero, y me dijo: Tú eres muy bueno, y a mí eso, o sea, de las cosas que me llevo en mi vida, que me dijera Mercedes Milá un día, dice: tú eres muy bueno. Yo digo: pues si yo era un reportero de mierda, pues tío, me lo dijo, y a mí eso me llenó de orgullo un montón, y yo le tengo mucho aprecio. - ¿Os habéis intercambiado algún mensajito? - No, no, de momento no, de momento no. Aparte, es una cosa que yo respeto un máximo a Mercedes y es ella la que marcaría los tiempos en cualquier caso. ¿Qué le voy a decir yo? ¡Uh, empiezo Gran Hermano! O sea, si me quiere mandar un mensaje, yo estoy agradecísimo y le mandaré un beso gigante. - ¿Ion, tienes algún concursante favorito de todas las ediciones que han pasado de Gran Hermano? - Bueno, yo diría que la edición que me enamoró fue la primera, porque yo creo que fue la más esencial cuando nadie sabía lo que estaba sucediendo fuera, y fue la más... ¿Cómo decirlo? Ingenua, tierna, donde ellos dicen, pues igual nos verá alguien y tal. Y entonces todo lo que pasaba en el interior era tan real, yo no he podido ser más fan de esa edición. - ¿Dónde estabas ahí, Ion? ¿Cómo era tu vida? - Vivía en Salamanca, estaba estudiando periodismo. Estaba más terminado el periodismo, y es verdad que nosotros teníamos...Vía digital que era en aquel momento, no veíamos la tele, veíamos el 24 horas, y en mi casa era como una religión, levantarnos y ver qué hacen. ¿Qué hace esta gente? O sea que... - Oye, ¿te veremos este año dando las campanadas, Ion? - Por supuesto, no lo sé. Imagínate, a uno o dos de septiembre... No tengo ni idea, es el sueño de cualquiera que se dedique a la tele, presentar telediarios o presentar las campanadas. No, no sé. - ¿Cómo llevarías un encierro, Ion? En una casa con gente que no conoces. - Muy mal. No tengo un carácter excesivamente fácil, tampoco muy complicado, soy un tío más o menos majo, pero es verdad que hay gente que me irrita mucho. Tengo un pronto también, y si no como y no duermo, lo llevo mal. - ¿Cómo soportarías a una Maite Galdeano? - Suso, por favor, a lo tuyo, a lo tuyo. A lo tuyo. (A Suso) Lo hizo fatal. No, no. Somos amigos, vete por ahí. - ¿Cómo hubieras convivido, por ejemplo, con una Maite Galdeano? - No, no, no. O sea, va, esto es otro nivel. O sea, hay concursantes de Gran Hermano y luego está otro nivel. Hay leyendas, leyendas de la vida. Maite... ostras. Yo hubiera flipado, me hubiera reído mucho, pero también yo creo que, no sé, le hubiera hecho algo. Y Aida también. - Ha vuelto a la tele Aida. - Sí, sí, lo sé, lo sé, lo sé. Joer, pues me parece un personajazo. O sea, y un fichaje que, oye, que lo disfruten también. Tiene cosas buenísimas, que creo que es un monstruo televisivo. Sí, pero luego... nosotros coincidimos en Sálvame, ojo un tiempo y es verdad que, joer, es una tía súper profesional. Lo que le pedías lo hacía, yo he salido a grabar con ella alguna vez. No es de estas divas que tal, es una tía que se baja al barro, que había que grabar un reportaje y decir tal. Y ella tenía las narices ya. A veces había gente que no le quedaba muy bien y la tía con sus dos narices es muy valiente en ese sentido. Es decir, que también hay que valorar eso. - Hoy han vuelto tus compañeros con su programa, imagino que felices por ellos, ¿no? María, Belén, todos. - Hombre, yo les tengo un cariño increíble y les deseo lo mejor siempre. A María, a Belén, a Kiko, a los Kikos, a todos. Me parece que son de los mejores, si no los mejores colaboradores que hay en la televisión para hablar de lo que hablan. Y, además, son tíos estupendos. Son profesionales como la copa de un pino y conmigo han sido compañeros maravillosos. A todos ellos, un abrazo gigante. - Y la última, te quiero preguntar. Tú eres padre, hemos conocido el tema del que está hablando toda España, de Rodolfo Sancho. No sé qué opinión tienes tú. - De verdad que no puedo opinar de estas cosas Son temas que están en manos de la ley. Ahora como padre, yo sufriría un montón por lo que sucedió, por lo que ha tenido que vivir y por lo que están viviendo. Como padre, imagínate, el dolor es increíble de ver que un hijo tuyo está en la cárcel, de que ha sido condenado por un delito terrible. Bueno, un horror, tío, un horror. - Mucha mierda, Ion, te queremos. - Vamos ahí. - A por todas.