María Casal evita pronunciarse en el caso de Daniel Sancho

María Casal evita pronunciarse en el caso de Daniel Sancho, aunque se muestra muy respetuosa con el trabajo de su padre: "yo, no puedo opinar, yo... Yo le admiro mucho como actor, coincidí muy poquito con él en una película y es un tema muy delicado y muy de familia". En cuanto a lo duro que puede ser su trabajo a veces, María reconoce que es algo que ha mamado en casa desde pequeña por su padre: "bueno, yo soy hija de un actor, de Antonio Casal, entonces a mí nadie me dijo, ni tampoco me prohibieron ser actriz. Me dijeron, pues muy bien, tú verás, haz lo que quieres, yo no vine aquí engañada, yo ya sabía lo que era, pues eso, sobre todo lo que peor lleva un actor es cuando no trabaja. Trabajar mucho siempre es divino y luego tienes unas compensaciones que no tienen otros trabajos, que es el público, el cariño del público, sobre todo, que gracias a ellos estamos aquí". Sobre cómo lleva lo de las etapas en las que no se trabaja, comenta: "pues, mira, es una cosa del curro, que claro, si quieres trabajar todos los días, coge otro trabajo". Total María Casal: - Pues muchísimas gracias, la verdad que no podíamos faltar al festival de Vitoria, yo creo que es el más importante de todos los festivales de televisión, y con respeto a los otros, y muy ilusionada por venir aquí con Joseba y a Vitoria. - Aquí no nos podemos perder, oye esto apunta maneras, hemos visto ya la rueda de prensa. - Pues mira, no os lo debéis perder porque es una serie que tiene un guion fantástico, una luz blanca, luce una fotografía maravillosa, unos actores que no están mal, y yo creo que es como embarcarse un poquito en un sueño, es como dejarse llevar por estos personajes que tienen una vida... hasta cierto punto verosímil, pero que tiene un poco de ribete de ensoñación, de salir del día a día. Es una serie diaria que no tiene nada de diaria ni de cotidiana, es una serie diaria que piensa a lo grande. - Con tantos años de profesión en la espalda ¿Qué aprendes? ¿Qué sigues aprendiendo? - Pues mira, con este personaje en concreto, con Paca Utrera, he aprendido muchísimo. Porque aparte de ser la villana, no tiene nada de convencional, es una mujer muy peligrosa y muy distinta a todo lo que te puedes imaginar y yo creo que me ha enseñado unas cuantas lecciones, ¿no? Para cosas que puedo hacer y para cosas que no debo hacer. - Es muy dura también la carrera de actriz, María, porque muchas veces pensamos en ser actriz, actor, estar en un medio público, es todo color de rosa. ¿En tu caso? - Bueno, yo soy hija de un actor, de Antonio Casal, entonces a mí nadie me dijo, ni tampoco me prohibieron ser actriz. Me dijeron, pues muy bien, tú verás, haz lo que quieres, yo no vine aquí engañada, yo ya sabía lo que era, pues eso, sobre todo lo que peor lleva un actor es cuando no trabaja. Trabajar mucho siempre es divino y luego tienes unas compensaciones que no tienen otros trabajos, que es el público, el cariño del público, sobre todo, que gracias a ellos estamos aquí. Y, por ejemplo, cuando haces teatro ese pequeño hilo invisible que hay entre el espectador y el actor, que es tan importante y tan bonito. - Y las esas esperas, como tú decías, el que no te llamen o el que no tiene trabajos, ¿cómo se lleva? - Pues, mira, es una cosa del curro, que claro, si quieres trabajar todos los días, coge otro trabajo. - Mira, te quería preguntar, hay muchos compañeros que lo están hablando, han alzado la voz... Otros no quieren opinar, no sé tú, en tu caso, se está comentando que, dado Rodolfo Sancho, ya habría podido acabar su carrera profesional, dado el caso de su hijo, ¿tú crees que se le ha acabado la carrera profesional, por este caso? - Yo, no puedo opinar, yo... yo le admiro mucho como actor, coincidí muy poquito con él en una película y - Quiero recordar que trabajaste con él. - Es un tema muy delicado y muy de familia. - Vivencia y respeto. - Sí. - Como compañero, imagino -