PARTE 1- Gabriela Guillén da la cara por Bertín ante las críticas: "Es el padre de mi hijo"

Gabriela Guillén asegura que ha hablado con Bertín Osborne y él no está molesto por las declaraciones que ella ha hecho sobre la exclusiva con su hijo, David: "es que no voy a decir nada. Yo acabo de hablar con él y está bastante bien, tranquilo". Añade: "él está bien, está bien, estamos bien, o sea, no hay ningún problema". Insiste: "no está enfadado, seguramente habrá aclarado las cosas, pero no está enfadado para nada. Seguramente que está enfadado porque hay muchas personas que saca de quicio esto, o sea, lo que queremos es normalizar y ya está, no hay más. Queremos normalizar una relación que tiene su padre con su hijo y su madre, o sea, igual". La empresaria se reitera y dice que le beneficio de la exclusiva es: "para el niño" Gabriela subraya: "es para un fin, ya está. Para el niño, ya está. Que no sea un niño escondido, lo que hemos dicho. Y no hay más nada". Cuando le preguntan si existe una foto donde sí están posando ella, Bertín y el niño, responde: "eso queda para nosotros". Evita definir a Bertín como padre: "es el padre de mi hijo, o sea, yo no voy a hablar mal de él como nunca lo he hecho. ¿Vale? Puedo evitar no hablar, pero hablar mal no lo voy a hacer". A lo que suma: "yo puedo decir por mí, pero cada uno que se valore a él sí mismo". Guillén comenta que la relación con Bertín está bien pero: "estamos bien, y vamos a estar mejor si es que no se saca de quicio lo que hemos querido decir, y ya está". Y si le insinúan si todavía siente algo por el padre de su hijo, se limita a decir: "yo lo único que pienso es el bienestar de mi hijo y el día de mañana, que no se diga ni que se ha dicho, se ha hecho, que se le confunda él. Solamente por ese motivo". Total Gabriela Guillén: - David, ¿cómo estás? - No he ido todavía, ¿sabes? - Ya has visto, es que en este rato han pasado muchas cosas. Bertín ha mandado un comunicado. - ¿Ah, sí? - Por parte de Hola, diciendo que él no ha cobrado nada, lo ratifica, y que no te pidió nada a cambio, ni ha pedido nada a cambio del posado. Eso es así. - Es que no voy a decir nada. Yo acabo de hablar con él y está bastante bien, tranquilo. - ¿Tú quieres desdecirte de algo de lo que nos has dicho antes? ¿Hay algo que te hayas explicado mal, quizá? - Es que no he dicho nada. No he dicho nada de lo que no tenga que, o sea, que no sea verdad. - Con respecto al beneficio de esa exclusiva... - Es que no, os he dicho que... - Pero no quieres desmentirle a él de que él no haya cobrado, eso por ti también es cierto, ¿no? - Es que lo que he dicho es eso, o sea, no, malintencionados, intentáis las cosas, o sea, de... - No, es que simplemente las palabras no han quedado claras. - El beneficio es para el niño. - ¿Y en cuanto a la idea de la exclusiva, la tiene la revista y os la traslada a los dos? ¿O tú se lo trasladas a Bertín después de que la revista te lo haga llegar a la revista? - No sé, mira, voy a hablar ahora con Bertín porque no sé qué ha salido, qué no ha salido, y no voy a comentar algo que no... - Pero tú has hablado hoy con Bertín, él estaba contento, os habéis los dos dado cuenta. - Él está bien, está bien, estamos bien, o sea, no hay ningún problema. - ¿No entiendes entonces ahora que él esté enfadado con lo que haya? - No está enfadado, seguramente habrá aclarado las cosas, pero no está enfadado para nada. Seguramente que está enfadado porque hay muchas personas que saca de quicio esto, o sea, lo que queremos es normalizar y ya está, no hay más. Queremos normalizar una relación que tiene su padre con su hijo y su madre, o sea, igual. - Tú ahora te estás enfadando, ¿no? - No, pero es que hay muchos comentarios que yo no voy a entrar a ellos. Si voy a entrar a los comentarios malos que dan... O sea, la revista y la portada es para un fin, ya está. Para el niño, ya está. Que no sea un niño escondido, lo que hemos dicho. Y no hay más nada. - Lo último sobre lo que nos has dicho, que explicas el perdón, que hay quien no lo ha entendido del todo. ¿Eso quiere decir que tú a Bertín le has perdonado lo que no te gustó del pasado? - Mira, yo no soy quien para perdonar o no perdonar a nadie, ¿vale? Eso primero. - Pero rencor hacía Bertín no hay. - Es el padre de mi hijo, o sea, yo no voy a hablar mal de él como nunca lo he hecho. ¿Vale? Puedo evitar no hablar, pero hablar mal no lo voy a hacer. - ¿Y cómo vive la distancia? - él vive en Sevilla y yo en Madrid, como ya sabéis. Esto ya, luego que se pueda arreglar de alguna manera, se tendrá que hacer, pero obviamente no lo vamos a decir y comunicar a todo el mundo. - Como padre sigues sin querer mojarte de decir buen padre o no buen padre. - Es que yo no soy quien para decir eso. - Igual que cuando dijiste... - Yo puedo decir por mí, pero cada uno que se valore a él sí mismo. - Lo que ves ahora de él con el niño, ¿cómo lo ves? Igual que en su momento se dijo que era un padre ausente, ¿ahora mismo cómo le ves? - No, lo siento mucho, pero de verdad que estoy cansadísima y quiero ir a ver a mi hijo. De verdad, os agradezco que estéis aquí, pero no voy a decir más nada de lo que he dicho. - Pero con Bertín no estás molesta, ahora mismo que te vemos un poco enfadada. - No, lo que estoy molesta es que se saque de quicio una portada tan bonita de lo que hemos querido decir. Que hemos posado con nuestro hijo y que se saque de contexto de lo que es. Que si se ha pagado, quién se ha llevado el beneficio. Es importante cuando hemos decidido los dos, hemos decidido hacer esto. Nadie ha obligado a nadie y nadie ha... No, esto lo hemos decidido los dos y ya está. No hay más. - Simplemente para entender el contexto y que las versiones casen y estén... - Pues si él ha sacado algún comunicado, pues algo le habrá molestado, porque conmigo no está molesto. - Ahora en directo te están escuchando en Antena 3. - Ah, pues mira, avisádmelo. Ahora mismo sí, justamente. Entonces, nos decías que el beneficio, que quede claro, que es para tu hijo. - Mira, este mundo es tan malicioso, de verdad, que tenemos que hablar siempre del dinero. No veis lo de la portada, lo que es, para qué es. O sea, el beneficio va a ser 100% para mi hijo. O sea, no es el beneficio, es para mi hijo y ya está.