Laura Madrueño: sus planes personales ahora que ha terminado 'Supervivientes'

Laura Madrueño nos cuenta cómo es estar fuera de su casa tantos meses: "Es demoledor el trabajo durante todos estos cuatro meses y la burbuja que vivimos allí y lo difícil que es también mantener la vida con Madrid con ocho horas de diferencia y el trabajo con ocho horas de diferencia que también nos resta muchísimas horas de sueño allí". La presentadora disfrutará de unos días de descanso con su familia: "Unas ganas tremendas de estar con los míos, de disfrutar de la comida de aquí, que yo aunque como y me cocino mucho allí, dios mío, la comida de mamá, eso no tiene precio, así que con muchísimas ganas de disfrutar". Total Laura Madrueño: - Bueno, menuda edición, ¿no? Recién llegada. - Recién llegada agotadísima, pero tan orgullosa de todo el trabajo que hemos hecho, del gran equipo que tenemos allí en Honduras y aquí en Madrid, y sobre todo del colofón final que hemos tenido con esta gran final, que ha sido absolutamente... Yo estoy totalmente abrumada todavía, vais a tener que perdonar, porque todavía asimilando todo lo que pasó anoche y sobre todo los datos de audiencia que hemos tenido, no solo al de la edición, sino obviamente el broche final que tuvimos ayer. - ¿Qué esperabas de este ganador merecido? - Merecidos todos, ya lo sabéis, sobre todo los últimos cuatro que han llegado hasta aquí a la final, pero creo que lo bonito que ocurrió anoche fue que yo creo que a todos nos sorprendió, la gala, los televotos, los juegos y todo lo que fue ocurriendo. O sea que muy contenta por Borja, pero también muy sorprendida y me pareció absolutamente mágico vivir una final tan, tan emocionante que nos llegue a sorprender hasta el final para que todo el mundo se dé cuenta de que este programa es absolutamente real y que puede pasar cualquier cosa hasta el último minuto. - ¿Tenías ganador en tu porra o no? - Eso no te lo puedo decir, para mí son todos, les trajemos un cariño tremendo, pero bueno al final...obviamente lo que se comenta, lo que la gente lo ve, pues te esperas que pasen unas cosas u otras, pero fijaros, es que ni siquiera, más a mí me gusta no saber absolutamente nada, siempre les digo no me digáis nada porque yo como allí también estoy acostumbrada a estar a ciegas, aquí también ayer estuve fuera, no tengo programas y les digo siempre no me digáis ni los porcentajes, ni quién está detrás cuando expulsamos en Palapa, también para mí es sorpresa hasta el último momento y lo vivo con ellos así. - Siempre tienen palabras súper bonitas para ti todos los concursantes. - Bueno para mí es una felicidad porque es que es muy duro este programa y vivimos muchísimas semanas allí, nos fuimos en febrero y al final cómo no te vas a coger cariño y yo lo paso mal cuando ellos vienen con hambre, cuando les veo agotados, vimos anoche, Borja estaba a punto de la hipotermia, casi no podía ni andar, o sea es que realmente se dejan la vida por las pruebas, son absolutamente generosos y cómo no vamos a hacerlo cuando se lesionan, pues lo mínimo que les puedo dar es todo el cariño que pueda. - En el terreno profesional es increíble y en el terreno personal cómo se lleva estar cinco meses en este caso, más o menos, un poco más que el año pasado, pues lejos de tu pareja, de tu familia... - Sí, cinco meses y medio porque hicimos el All Star del tirón. - Pues lejos de tu pareja, de tu familia... No sé si en este caso te han ido este año a ver... - Es muy duro, es muy duro. Bueno, lo comentábamos ahora que hay que ser muy fuerte psicológicamente para soportarlo porque laboralmente es tremendo el trabajo que hacemos allí. Es un trabajo constante, te casas con el reality porque te dedicas a ello de pleno y nos dejamos la piel totalmente porque el día que no tenemos gala estamos preparando, estamos con la resaca de la gala anterior preparando todo lo que está pasando o todo lo que queremos que pase en la siguiente. Es demoledor el trabajo durante todos estos cuatro meses y la burbuja que vivimos allí y lo difícil que es también mantener la vida con Madrid con ocho horas de diferencia y el trabajo con ocho horas de diferencia que también nos resta muchísimas horas de sueño allí, con lo cual... - Es un poco como Gran Hermano. - Es muy Gran Hermano. - Para vosotros me refiero. - No, hay un reality también. Obviamente somos 200 personas, imagínate. Unas ganas tremendas de estar con los míos, de disfrutar de la comida de aquí, que yo aunque como y me cocino mucho allí, Dios mío, la comida de mamá, eso no tiene precio, así que con muchísimas ganas de disfrutar. - Estaba comentando ahora que Anita y Montoya están un poco fríos, ¿tú los has visto así después de ayer de la final? - Pues la verdad es que no me ha dado nada de tiempo porque cuando he llegado me he estado probando ropa, ha sido una locura de medios y tal y no he podido. Ver qué les ha pasado o qué no les ha pasado ya, yo ya estoy libre. - ¿Vas a volver? ¿Te planteas seguir llevando la isla desde allí? - Bueno, de momento vamos a disfrutar esto que lo estamos todavía saboreando, que hemos terminado hace apenas unas horas y ya veremos ahora qué nos depara la tele y qué nos depara la nueva etapa. Pues el verano para descansar, ya os he dicho, para estar con mi familia, con los míos, para comer rico y para desconectar, por favor, sí. Por favor, tengo unas ganas de irme a una tortilla. Bueno, fíjate, he dicho fíjate tú que sí, simil, no, eso creo que no me haya pasado. Ahora este año también te digo que he tenido algún momento que he dicho, o sea, casi me comen a mí, los pobrecitos míos del hambre que han pasado. No, pobres, gracias a vosotras.