Terelu Campos llega a España tras su paso por 'Supervivientes' con las cosas muy claras

Primeras declaraciones de Terelu Campos de regreso a España. Cuando le preguntan por Mar Flores, responde: "no tengo nada que decir, de verdad. Nada de nada". Cuando le dicen que las cosas deben llegar a su tiempo, contesta: "ay, sí, de verdad, yo no tengo prisa de nada. Lo que sí quiero es fumar un cigarro, que no me fumo cigarro en 25 horas". Sobre si tiene ganas de ver a su nieto Carlo, está tan cansada del viaje, que exclama: "con ganas de ver mi cama. Lo primero". Terelu se entera al aterrizar de que ha sido Montoya quien se ha salvado: "ah, vale, me alegro. Bueno, por un lado me alegro y por otro lado me da pena Carmen, ¿eh? No, a ver, me hubiera puesto contenta también, te acabo de decir, si se salva Carmen, ¿eh? Los dos me dolían. No voy a mentir, me dolían los dos. Cualquiera de los dos que se fuera me dolía". Total Terelu Campos: - ¿Qué tal, Terelu? Bienvenida. - Bien. Estoy muy cansada, cariño. Entended que son las 5:00 ... las 6 menos 20 de la mañana y no puedo más. - Imagínate cómo estamos nosotros - Ya, cariño. Sí, pero tú no te has hecho ni tropecientas horas de viaje como yo. - Bueno, con ganas de volver. - Con ganas de llegar a mi casa - La rutina, todo bien, ¿no? - ... - Nos hemos reído mucho contigo - Me alegro - Con ganas de ver al nieto, Terelu. - ... - Imagino con ganas de comértelo, ¿no? - ... - Eso no podía estar más lejos, ¿eh? No, está muy lejos la puerta. Me estáis preguntando los dos a la vez, con lo cual yo no he dormido en todo el vuelo. Estoy agotada y tengo que trabajar esta noche. - Con ganas de ver a Alejandra, al Peque, a todo el mundo, ¿no? - Con ganas de ver mi cama. Lo primero. - Y con Maco, ¿qué tal las cosas, hija mía? - ... - El otro día le preguntábamos a Mar si iba a producir un encuentro entre vosotras y salió corriendo cuando le preguntamos - ... - ¿Tienes ganas ya de encontrarte con ella para que se acabe todo esto de que si os vais bien, mal, la planta? - No tengo nada que decir, de verdad. - Poco a poco, ¿no, hija mía? - Cuidado, nada de nada. - Que llegue todo cuando te haya que llegar, imagino, ¿no? - ¿Qué? - Que llegue todo cuando te haya que llegar. - Ay, sí, de verdad, yo no tengo prisa de nada. Lo que sí quiero es fumar un cigarro, que no me fumo cigarro en 25 horas. - ¿Te la ha puesto muy duro, Maco, que por aquí por los Cayo Cochino? - No voy a hablar de nada, Sergio, cariño. - ¿Montoya ha salvado? - Vosotros ya habéis visto. ¿Quién se ha salvado? - Sí. - Es que no lo sé, si veníamos en el avión. - ¿Quién se ha salvado? - Montoya. - Ah, vale, me alegro. Bueno, por un lado me alegro y por otro lado me da pena Carmen, ¿eh? - Sí, ¿no? ¿Qué crees que pasará ahora? - No sabemos nada, ¿eh? Ten en cuenta que he metido 10 horas en un avión con un cambio de horario de 8 horas. Ni idea, vamos. - Bueno, tú estarás contenta. - Me alegro por Anita y lo siento por Carmen, porque es una tía estupenda. - ¿Te has puesto más contenta al saber que se salvó Montoya? - No, a ver, me hubiera puesto contenta también, te acabo de decir, si se salva Carmen, ¿eh? Los dos me dolían. No voy a mentir, me dolían los dos. Cualquiera de los dos que se fuera me dolía. - Vienes contenta y orgullosa de tu paso, ¿no, Terelu? - Yo vengo tranquila. Yo muy tranquilita, cariño. - Te lo has pasado bien, ¿no? - Bueno, tanto como bien, no es - Pero has conseguido muchas cosas esta vez. - Sí, sí, sí, sí, sí. - Y aquí no están las cosas tan difíciles, a mi acaso. Tienes plancha, tienes plancha, pero no mucha. - No tengo ni idea, te lo prometo. Lo que quiero es llegar a mi casa y tomar un Coca-Cola. - Belén también ha hablado, Terelu, para que lo sepas. - Me alegro, que hable todo el mundo que quiera. Que todo el mundo tiene derecho a hablar. Un besito cariño, un abrazo a todos. - Gracias, te queremos Imágenes de Terelu en el aeropuerto despidiéndose de compañeros y caminando hasta el coche.