Dani Rovira se abre en canal en su nuevo show ‘Vale la pena’

Ficha técnica


Fecha 14/01/2025
Parte 1
Duración 00:09:32
Sonido Totales y Ambiente
Edición Editado
Localización Madrid
Firma Europa Press

Dani Rovira se abre en canal en su nuevo show 'Vale la pena': "he aprendido que, a pesar de todo, es verdad que vale la pena, y si he aprendido algo en toda esta experiencia es a conocerme un poquito más, a darme cuenta que... Ya te digo mi verdad, pero si esto luego lo cuentas y la gente se ve identificada, pues a ser uno mismo. Es que parece como una perogrullada, pero no lo es. A ser uno mismo porque vivimos en una sociedad donde prácticamente te obligan a que te vayas poniendo como disfraces, máscaras para encajar, para que te quieran, para que no te abandonen, con las amistades en el cole, en el instituto, con tu pareja, con tu padre, con tu madre, redes sociales... Estamos todo el rato intentando y creo que, conforme van pasando los años, hay una esencia que se va perdiendo, entonces tienes tantas máscaras que no sabes realmente quién eres tú, entonces la vida te pega una hostia enorme y ahí se te cae todo, y ahí es donde empieza la catarsis, y ahí es donde empieza el vértigo, el no tener suelo debajo de los pies y decir ¿qué es esto? Y ahí con mucha lectura, con mucha terapia, con mucho amor, con mucho humor, uno va aprendiendo, y yo lo que he aprendido es a ser yo mismo, fíjate, que parece poco, pero te das cuenta de que llevas muchos años intentando agradar, te pasas por encima, no te priorizas, eres lo que la gente quiere que tú seas, porque tú necesitas que la gente te quiera, entonces, como no, se acabó, yo necesito quererme yo, y a partir de ahí, para afuera". El humorista confiesa que se ha roto en algunos momentos durante la preparación de su proyecto más personal: "al principio, bueno, me rompía en algunos momentos. Yo, de repente, había frases que tenía que parar, que tenía que tragar y pero que forma parte, es como que no me da vergüenza emocionarme encima de un escenario, es como, de lo que habla el show es así, ¿por qué tenemos que esconder la tristeza? ¿por qué es tabú? ¿por qué un hombre no puede llorar en público? ¿por qué se le dice a un niño pequeño que llora, no llores, que está muy feo? ¿por qué? Porque llega un momento en que la alfombra ya no puede albergar más mierda debajo, entonces, como vamos a admitir que, si estás triste, estás triste, que si te ríes, pues te ríes, y si tienes miedo, pues decilo, oye, mira, que tengo un poco de miedo, ¿te importaría a ti pasar antes que, a mí, porque me da un poco de miedo? Sí, claro, sin problema, ¿te importa darme la mano? Que estoy un poco asustado en el avión, no te conozco ya, pero es que... Joder, crear una sociedad un poquito donde todas las emociones existen, son válidas, y todas valen para algo". En cuanto a cómo se encuentra tras haber superado el cáncer del que fue diagnosticado en 2020: "ahora muy bien, me siento muy tranquilo, tengo mucho tiempo para mí, y no sé, yo poder refugiarme en mis amigos, poder refugiarme en mis libros, en mi deporte, mi perrete, mi show sí, sí, para mí cada día es una oportunidad de ser un poco feliz, y ya está, y luego cuando te viene algo torcido, pues lo afrontas, ya está, porque a veces hay en la vida cosas que están torcidas, o hay problemas y hay que ocuparse, pero muchas veces parece que solo vemos ese problema, entonces si giras ves que el resto de la vida está bien, y aquí hay un problema, bueno, nos ocupamos". Completamente renovado, Dani Rovira hace un llamamiento y pide que se invierta más en salud mental: "son diez años de terapia. Digo, pues mira, si con este show puedo recuperar todo el dinero que he gastado en terapia, que barata no es, también vamos a decirlo. Es un poco costosa y es verdad que no todo el mundo puede costearse una vez por semana o cada quince días terapia, y eso es una putada. Y desde aquí hago un llamamiento también, no a la seguridad social, sino a que sigamos apoyando la seguridad social y que la rama de la salud mental esté más, que no sea un médico que te diga, pues mira, si estás con depresión, estás con ansiedad, tómate un orfidal. Una terapia de, bueno, antes de empastillar, vamos a hablar, vamos a tratar a ver qué pasa, vamos a rascar, vamos a conocernos, vamos a identificar, no sé, pues lo que se hace en terapia. Que yo creo que es necesario, de las cosas más necesarias al día de hoy en nuestra sociedad". Este tema es en exclusiva. Total Dani Rovira: - 'Vale la pena', ¿de dónde surge? - ¿De dónde surge 'Vale la pena'? 'Vale la pena' es un espectáculo que surge de un proceso personal de cuatro años donde uno ha atravesado diferentes estadios emocionales, entre ellos la pena. Entonces me parecía muy guay la expresión 'vale la pena', que la usamos cada dos por tres. Yo creo que vale la pena estar aquí, vale la pena estar vivo, vale la pena todo esto También como una especie de calambur o juego de palabras donde poder decir que la pena, como concepto, también vale. Aunque huyamos de ella, aunque metamos la tristeza debajo de la alfombra, yo soy el que dice que cuando te llega una realidad que es muy jodida y la realidad es la que es, pues mira, como soy vegano no voy a decir hay que coger el toro por los cuernos, voy a decir hay que coger la rosa por las espinas e intentar aprender de eso. O sea, ya que te has pegado una hostia enorme, que no caigan saco roto. Este es el resultado de un aprendizaje de cuatro años de un periplo un poquito más jodido. - ¿Es autobiografía? - Sí, podría ser autobiografía y destilado con mi licor de humor. ¡Qué bonito ha quedado eso! - Yo creo que tienes que ser actor para poder reírte de una gran pena. Juegas con ventaja respecto a mí. - No, fíjate que aquí arriba es donde menos actor soy. Si yo creo que este espectáculo está funcionando es porque hay una honestidad brutal. Yo nunca contaría algo que no me ha pasado a mí, entonces no creo que este show sea muy actoral. Obviamente Dani Rovira que se sube en el escenario es como un alter ego del normal, porque estoy más espídico e imagínate lo de aquí dos horas todo el día. No me soportaría ni yo, me tiro por un puente, pero no, no hay mucho de actor porque hay mucho de mí en lo que cuento. Entonces yo creo que eso es más allá del humor, de si es verdad o no es verdad lo que digo, si te llega o no te llega. Como lo digo desde un lugar honesto y desde mi verdad, pues creo que llega. - ¿Es para ahorrarte un poco la terapia? - No, para compensarla, claro, porque son diez años de terapia. Digo, pues mira, si con este show puedo recuperar todo el dinero que he gastado en terapia, que barata no es, también vamos a decirlo. Es un poco costosa y es verdad que no todo el mundo puede costearse una vez por semana o cada quince días terapia, y eso es una putada. Y desde aquí hago un llamamiento también, no a la seguridad social, sino a que sigamos apoyando la seguridad social y que la rama de la salud mental esté más, que no sea un médico que te diga, pues mira, si estás con depresión, estás con ansiedad, tómate un orfidal. Una terapia de, bueno, antes de empastillar, vamos a hablar, vamos a tratar a ver qué pasa, vamos a rascar, vamos a conocernos, vamos a identificar, no sé, pues lo que se hace en terapia. Que yo creo que es necesario, de las cosas más necesarias al día de hoy en nuestra sociedad. - Dices que es un poco el balance de esta trayectoria de cuatro años, ¿qué has aprendido? Porque como habrás tenido que rememorar. - Sí, bueno, he aprendido que, a pesar de todo, es verdad que vale la pena, y si he aprendido algo en toda esta experiencia es a conocerme un poquito más, a darme cuenta que... Ya te digo mi verdad, pero si esto luego lo cuentas y la gente se ve identificada, pues a ser uno mismo. Es que parece como una perogrullada, pero no lo es. A ser uno mismo porque vivimos en una sociedad donde prácticamente te obligan a que te vayas poniendo como disfraces, máscaras para encajar, para que te quieran, para que no te abandonen, con las amistades en el cole, en el instituto, con tu pareja, con tu padre, con tu madre, redes sociales... Estamos todo el rato intentando y creo que, conforme van pasando los años, hay una esencia que se va perdiendo, entonces tienes tantas máscaras que no sabes realmente quién eres tú, entonces la vida te pega una hostia enorme y ahí se te cae todo, y ahí es donde empieza la catarsis, y ahí es donde empieza el vértigo, el no tener suelo debajo de los pies y decir ¿qué es esto? Y ahí con mucha lectura, con mucha terapia, con mucho amor, con mucho humor, uno va aprendiendo, y yo lo que he aprendido es a ser yo mismo, fíjate, que parece poco, pero te das cuenta de que llevas muchos años intentando agradar, te pasas por encima, no te priorizas, eres lo que la gente quiere que tú seas, porque tú necesitas que la gente te quiera, entonces, como no, se acabó, yo necesito quererme yo, y a partir de ahí, para afuera. - ¿Entonces, tu mayor obstáculo a la hora de hacer este espectáculo? - Mi mayor obstáculo, bueno... - ¿Qué más te ha costado? ¿Quieres contarnos algo? - No, bueno, es un show en el que, en algunos momentos, ya conforme lo va rodando uno más, pero al principio, bueno, me rompía en algunos momentos. Yo, de repente, había frases que tenía que parar, que tenía que tragar y Pero que forma parte, es como que no me da vergüenza emocionarme encima de un escenario, es como, de lo que habla el show es así, ¿por qué tenemos que esconder la tristeza? ¿Por qué es tabú? ¿Por qué un hombre no puede llorar en público? ¿Por qué se le dice a un niño pequeño que llora, no llores, que está muy feo? ¿Por qué? Porque llega un momento en que la alfombra ya no puede albergar más mierda debajo, entonces, como vamos a admitir que, si estás triste, estás triste, que si te ríes, pues te ríes, y si tienes miedo, pues decilo, oye, mira, que tengo un poco de miedo, ¿te importaría a ti pasar antes que, a mí, porque me da un poco de miedo? Sí, claro, sin problema, ¿te importa darme la mano? Que estoy un poco asustado en el avión, no te conozco ya, pero es que... Joder, crear una sociedad un poquito donde todas las emociones existen, son válidas, y todas valen para algo. - La sensación que te molas a ti mismo porque te gusta mucho el Dani Rovira de ahora. - Sí, sí, sí, claro. - El de antes, que te das cuenta, en plan de... - Es que antes no era del todo. Claro, que no es que yo fuera, de repente, otra persona. De repente, Carlos Latre, haciendo personajes, no, no, no... Pero, bueno, sí que había cosas que no me permitía, y muchas vienen de un material muy regresivo, y de ahí la importancia también de la terapia, de intentar entender por qué tiene ciertos patrones de comportamiento ante ciertas situaciones, y eso muchas veces viene de pequeñito, que somos un cubo de traumas cuando somos niños. Gente va echando, va echando, va echando, y ahora tú gestiónate tú, ya de adulto, lo que han hecho contigo. - Ahora se me ocurre, ¿te ha decepcionado mucha gente? ¿Has tenido que apartar a gente de tu camino? Que era en plan de, ah, que me querías porque era así, y ahora que estoy dando mi mejor versión, no te mola. - No, no, o sea, uno se decepciona a lo largo de la vida con... O sea, ¿sabes qué pasa? Que como yo no espero nada de la vida, y no lo veas como una afirmación negativa, a todo lo contrario, o sea, yo no espero nada de la vida. Las cosas más bonitas que me han pasado en la vida no las esperaba, porque es que espera, desespera, entonces yo lo que me venga lo gestiono, como el surfista que se tira al mar y dice... Si hoy hay olas guays, bien, si hay olas mal, bien, y cada día intentaré surfear. Entonces la decepción forma parte de una expectativa, entonces como yo cada vez tengo menos expectativa, en la gente, en las cosas, en la vida, es como lo que venga, guay. Las disfruto mejor, o sea, no tener expectativas hace que disfruten mucho más, las expectativas son las asesinas de la diversión. Estoy, vamos, que yo, pásame luego la cinta, que creo que estoy inspirado, no, broma. - ¿Cómo te encuentras ahora mismo? - Ah, muy bien, muy bien. Ahora muy bien, me siento muy tranquilo, tengo mucho tiempo para mí, y no sé, yo poder refugiarme en mis amigos, poder refugiarme en mis libros, en mi deporte, mi perrete, mi show Sí, sí, para mí cada día es una oportunidad de ser un poco feliz, y ya está, y luego cuando te viene algo torcido, pues lo afrontas, ya está, porque a veces hay en la vida cosas que están torcidas, o hay problemas y hay que ocuparse, pero muchas veces parece que solo vemos ese problema, entonces si giras ves que el resto de la vida está bien, y aquí hay un problema, bueno, nos ocupamos. Entonces intentar relativizar también en el quesito del 100% de las cosas, pues si hay un 20% que está un poco jodido, pues es un 20%, mira que hay un 80% que está guay, entonces, bueno, aliméntate de lo bueno para afrontar lo malo. - Entonces, ¿qué esperas ya para finalizar del público? ¿Cómo quieres que salga? - No quiero expectativa, pero quiero que lo llene, que lo llene. Quiero que se llene el teatro. - Esa es la única pregunta, ¿cómo quieres que se marche ese público que ha venido a verte? Que se ha arreglado y se ha acicalado. - Que se ha acicalado y se ha echado perfumico. Bueno, yo creo que se vaya reída, que es una cosa que es lo que uno promete. Es un show de comedia y yo quiero que la gente se vaya reída, pero bueno, que luego con él con la cervecita de repente si vas con tu pareja o con tu amigo, con tu padre, el poder hablar de ciertos temas que a lo mejor con tu padre nunca has hablado o de repente poder recomendar esto: "oye, yo creo que esta mamá le va a gustar o yo creo que este fulanito le va a gustar que está pasando por una época un poco así o un poco asá". No sé, creo que el boca, el corazón boca, en vez del boca el corazón, creo que puede funcionar mucho con este show. Imágenes de la entrevista a Dani Rovira durante la presentación de su show 'Vale la pena'. Este tema es en exclusiva

Relacionados