Lucía Rivera desvela su consejo a Cayetano ante su retirada: "No hagas eso que queda fatal"

Lucía Rivera, desde la retirada de su padre, Cayetano, hasta el acoso que sufrió de su ex. Sobre la despedida del torero, desvela cómo reaccionó ella cuando él le informó de su decisión: "¿en serio me estás mintiendo? Porque, a ver, él lo va a hacer de verdad, confío mucho en su palabra, porque si hace algo lo hace, es serio para todo, creo que lo sabéis. Pero, ¿sabéis que estos toreos que se retiran 50 veces? O Rafa Nadal que se lleva retirando 5 años seguidos. Él no va a ser así, pero le dije, a ver si vas a... No hagas eso, que queda fatal" y reconoce: "triste para él, alegre para mí. O sea, voy a ser una burra, alegre para mí, para maría y para toda la familia y los que están...". La modelo apoya a Fabiola Martínez por haber contado los abusos sexuales que sufrió en un libro, al igual que hizo ella: "pues le apoyo mucho y le brindo mi mano y un abrazo... Tú también le citas al lado del libro, claro. Es jodido reconocer que te maltrataron en España, ¿eh? Aquí donde vamos de modernos... España no es tan moderna como parece. Y la van a poner en duda muchas veces y... Bueno, así es España. Bueno, España y el mundo, no solo España. Hay que decir que tampoco... Que aquí estamos muy avanzados también. Bueno, le deseo mucha suerte y espero que le vaya muy bien. Me arrepentí, porque es algo que no te arrepientes, porque no puedes arrepentirte, porque es un paso muy valiente, pero... Va a tener que tragar mucho comentario que cuando es algo tan delicado duele, duele mucho. Entonces le deseo toda la suerte del mundo, no la conozco y le mando un abrazo gigante". Total Lucía Rivera: - Hola, ¿qué tal? Qué bien vas - ¿A que sí? Hoy estoy como Catwoman, ¿no? - ¿Es la noche de Alejandro, muy fan tú de él? Bueno, soy fan, que además la gente de mi edad no entiende que yo sea fan de Alejandro Sanz, digo, pero perdona, o sea, marcó todas las generaciones. - Una canción para llorar y otra para reír - Hostia, no me jodas, no me dejes mal, tío, o sea, ahí ha empezado a hacer corazón partido para llorar y después, déjala que baile, no, déjala que baile no era, déjala que te bese, déjala que te bese, esa, esa es para alegrarse un poco el día, ¿no? No, ahí sí me sé más, lo que pasa es que yo los títulos soy malísima, de verdad. - Oye, que despedimos este año tu mamá presentadora de las campanadas. - Yo estoy en shock, yo estoy acostumbrada a despedir el año con ella en pijama, ¿sabes? Y yo en pijama, o sea, somos muy caseras las dos, muy de estar, además pijama feo y de borreguillo, ¿sabes? No somos muy glamurosas para irnos a dormir, me mata a lo mejor ahora en breves, pero bueno, es verdad. Y ahora este año va a ser, boom, de repente en otro sitio. - ¿Te vas con ella? - Me voy, me voy, vamos, que se pensaba que si iba a ir sin mí a Lanzarote, ya te digo yo que no, al sol, vamos. - Decía para el vestido que ella siempre ha sido muy fan de la Pedroche, que ha defendido sus looks, ¿ahora compite con la Pedroche? - No, las mujeres no compiten. - No, desde luego, está muy bien. - No, las mujeres no compiten. No la veo yo compitiendo mucho con la Pedroche, o sea, y la Pedroche tiene un estilo muy diferente, o sea, son muy distintas las dos. Yo creo que mi madre en ese sentido va a ser un poco más sobria. Y mira que yo soy fan de la Pedroche y yo siempre me voy a la Pedroche, esta vez no, lo siento. Lo vas a asesorar. Lo siento, Cristina, te adoro, ¿eh? - La vas a asesorar un poquito. - Está ella asesorada, no sé si os lo digo, pero ya le metí caña, yo por ahí no te me vayas. O sea, yo con el tema de las... ya me veis, soy como... - Lo que sí nos dijo es que también se va a venir Fernando, tú. - O sea, que ya sabíais que iba con ella. Md has mentido - Sí. - No, él sí y yo no. - Ah, nene, pues sí, se viene, se viene. A ver qué tal. Bueno, ya se conocen y se llevan genial, o sea, tengo mucha suerte. Se lo acabo de decir a tu compañera y tengo mucha suerte. Me llevo Genial con mis suegros. Bueno, tengo unos suegros maravillosos, hay que decirlo, que es muy difícil tener suegros maravillosos, hay que decirlo también. He tenido suegro fuerte, sí. Y él se lleva muy bien con sus suegros también, con los dos además. - ¿Y tú cómo, nuera, cómo eres? Soy un amor. Regalo mucho, muchas cosas. Abrazo mucho. Es que además, como que, si es verdad que en mi familia somos como muy modernos. Y el resto de familias que conozco son más serias, más... bueno, pues más normales, digamos. Está feo decir eso, pero es así. - ¿Y él cómo es? - Y me lo disfruto, ¿sabes? Como, uy, algo diferente en mi vida, me gusta. - ¿Y él cómo es? ¿Tú mamá, tía, cuando estáis en Fernando? - Él se amolda a todo. O sea, sólo me lo llevé a un evento en mi vida, que fue a Puig o algo así. Estoy muy contenta. Estoy pidiendo que no lo lie mi madre. Voy a poner sí. Y dije, verás, porque a ver, la gente en la moda a veces somos un poco imbéciles, ¿sabes? Hay que decirlo, la gente es un poco retrasada. Perdón por decirlo así, pero es verdad. - Es que nos encanta cómo eres. - Es verdad, la gente mira por encima del hombro, te habla mal, es... hay gente maravillosa. Y yo tengo la suerte de haber encontrado toda esa gente maravillosa, pero es difícil llevar a alguien que no trabaja en esto y que de repente se ve con todos un poco la superficialidad, el momento del post, el momento del photocall que vamos todos así y después aquí eres súper glamuroso. Y yo dije, a ver qué tal lo lleva, porque he trabajado en una empresa, ¿sabes? Claro, y él lo llevó genial y digo, ¡eh, cabrón! Quería que te asustaras un poquito y nada, lo llevó genial. - ¿Vivís juntos o poco a poco, no? - Yo es que me encantan las relaciones a distancia, él no lo lleva tan bien. Él prefiere que viva con él, pero ahora mismo no. Pues no puedo, o sea, si es que si me voy a Mallorca dos semanas y ya vengo aquí, tengo todo acumulado y es un poco lío eso - Y actualidad, bueno, yo creo que imagino que tú estás contenta. Muchas veces hemos hablado de este tema y era algo que a ti tu papá se retira de los ruedos, ¿cómo recibes tú esta noticia, la retirada de Cayetano? - Triste para él, alegre para mí. O sea, voy a ser una burra, alegre para mí, para María y para toda la familia y los que están... - ¿Qué fue lo primero que le dijiste cuando te dijo, hija, no sé cómo te lo dijo, de qué manera? - ¿En serio me estás mintiendo? Porque, a ver, él lo va a hacer de verdad, confío mucho en su palabra, porque si hace algo lo hace, es serio para todo, creo que lo sabéis. Pero, ¿sabéis que estos toreos que se retiran 50 veces? O Rafa Nadal que se lleva retirando 5 años seguidos. Él no va a ser así, pero le dije, a ver si vas a... No hagas eso, que queda fatal. - Ha sido una tranquilidad para ti como hija, porque tú también sufrías. Y María lo decía también cuando le contestó. Qué felicidad. - Sí, a ver, también te digo, el tío aguantó mucho, son 49 años, 8 años. - Está guapísimo, si no pasa nada. - Está guapísimo No, pero la energía que tienes con 20 no la tienes a esa edad. Mi madre lo hizo con mi hermana. Ella dice a ti te tuve a los 21. Yo te tiraba, te llevaba, y ahora con el otro ya lo sufre. El riñón, el tal, lo sufro yo que tengo 25. Está muy bien ahora, lo vemos y está... - Está bien, está guapo. - Es que el cabrón no va a estar mal nunca, ¿sabes? - Dice tu madre que está entera, contenta, soltera. ¿A ti tú gustaría verla con alguien? - Soy, muy protectora con mi madre, ¿eh? - Sí, eres muy protectora. - Mucho más que con mi padre, vamos, porque... Sí, yo con mi madre... A ver, los hombres en general son más peligrosos que las mujeres. Es verdad, claro, o sea... Te lo digo. Sí, lo sabemos aquí todos, creo que si lo grito me dirán como... Sí, es verdad. Entonces, sí, muy protectora y después una tía que lo que tengo claro es que si lo encuentra va a tener sus límites puestos y eso. O sea, que en ese aspecto estaría tranquila. - Muchísimas gracias. ¿No le hay que añadir, señoría? Fabulosa, ¿eh? - Tener cuidado si os acercáis a mi madre, que estoy aquí a repartir. - Es verdad que se me ha venido ahora... No, no, no es mala, tú también ayudaste mucho a la juventud contando tu relato. Fabiola Martínez ahora ha hablado abiertamente... Sí, sí, de los problemas que ha tenido... La mujer de Bertín Osborne. La mujer de Bertín Osborne, perdón. Ha escrito un libro - ¿Ha escrito un libro? - Sí - Ah tengo que leerlo - No, no, es que... ¿Ha escrito un libro? - Sí. Sí, porfa, porque ha hablado también abiertamente de cuando se pasa mal con una pareja, cuando se sobrepasa esa pareja con esa persona y lo ha abierto públicamente. Tú también lo has... - He hablado del maltrato, quiero decir. Efectivamente. Tú dilo, hay que hablar del maltrato. Pues no lo sé, es que no he leído el libro, no tenía ni idea. Cuenta su experiencia, yo me acuerdo... Yo me acuerdo porque yo no consumo, ya lo sabéis que yo en tele me cuesta mucho verla. Veo mucho Netflix y a mi madre ahora que sale y si no, no lo vería. Pues le apoyo mucho y le brindo mi mano y un abrazo... Tú también le citas al lado del libro, claro. Es jodido reconocer que te maltrataron en España, ¿eh? Aquí donde vamos de modernos... España no es tan moderna como parece. Y la van a poner en duda muchas veces y... Bueno, así es España. Bueno, España y el mundo, no solo España. Hay que decir que tampoco... Que aquí estamos muy avanzados también. Bueno, le deseo mucha suerte y espero que le vaya muy bien. Me arrepentí, porque es algo que no te arrepientes, porque no puedes arrepentirte, porque es un paso muy valiente, pero... Va a tener que tragar mucho comentario que cuando es algo tan delicado duele, duele mucho. Entonces le deseo toda la suerte del mundo, no la conozco y le mando un abrazo gigante. - ¿Tú tragaste muchos comentarios imbéciles? - Los trago a día de hoy, pero no pasa nada. Ya estoy acostumbrada. Además, yo con el carácter que tengo, ¿tú te crees que yo hago así rápido y ya está? No pasa nada. - Muchísimas gracias, Lucía. Te queremos. Gracias.