Cristina Pedroche desvela como es Dabiz Muñoz como padre

Ficha técnica


Fecha 03/06/2024
Parte 1
Duración 00:06:32
Sonido Totales
Edición Editado
Localización Madrid
Firma Europa Press

Cristina Pedroche nos confiesa los miedos que tiene ahora que presenta su primer libro: "con miedos, no lo voy a esconder, porque lógicamente es lo más íntimo que he hecho, lo más transparente. Me van a dar por todos los sitios, como siempre, como siempre". La periodista reconoce que: "yo cuento mi historia, pero al contar mi historia también cuento un poco la de mi hija, con más pies de plomo" Cristina Pedroche nos asegura que esté en un momento: "feliz, feliz" y aunque no le gusta hablar de su marido, Dabiz Muñoz: "estoy cada día más enamorada de él". Total Cristina Pedroche: - ¿qué tal, Cristina? Bueno, que estamos de celebración, quinto aniversario de la Tres Player. ¿Cómo te sientes? - Pues muy bien, muy contenta de pertenecer a esta gran familia que es la Tres Media y yo pues en cada celebración ahí me tienen - En las fiestas hay que estar, hay que disfrutar, hay que celebrar, en este caso, el trabajo. - Pues sí, totalmente. Muy orgullosa y vamos, muy honrada de tener el trabajo que tengo y en cada celebración hay que estar, hay que apoyarles en todo, o sea que yo feliz. - Qué balance haces de todo este tiempo que llevas profesionalmente, ya son años, ¿eh? - Sí, desde el 2010, ya son años.. Hago un balance muy positivo, o sea, muy para arriba y que así sea. Yo estoy muy feliz y muy contenta de, es que, no sé, es que no me veo en otro sitio, la verdad. - ¿Y cómo fue tu vuelta al trabajo? ¿Cómo te sentiste cuando volviste? - Pues muy bien, porque, no sé, cuando se hace de todo de una forma tan orgánica y natural, pues sale muy bien. He tenido siempre un.es que mi casa es muy generosa, entonces yo he podido organizarme muy bien, mis horarios, mi conciliación, lógicamente no es el que tienen todas las mujeres, que ojalá fuera así, entonces yo no puedo sacar ni una sola pega, estoy feliz. - Se echan de menos tus bailes. - Ya, yo también, pero es que estoy tan cansada, que además es que llego con la hora súper justa para sentarme prácticamente en el asiento, que no me da la vida para más. - ¿Cómo te ha cambiado la vida? ¿La vida cambia? - Pues todo, claro, que son otras prioridades, son otros tiempos, otros miedos, por eso lo del libro. Otro todo. - Justo vas a presentar el libro dentro de dos días, vas a estar en la firma de libros, en la feria del libro. ¿Cómo te sientes también con este primer libro? - Pues muy bien, muy contenta de poder presentar ya el libro, con ganas. Con miedos, no lo voy a esconder, porque lógicamente es lo más íntimo que he hecho, lo más transparente. Porque una cosa es cuando me preguntáis por mi trabajo, o campanadas, cosas así, que es otra cosa. Aunque campanadas también lleva mucho personal. Pero esto es otra cosa, porque son mis sentimientos, en el fondo yo cuento mi historia, pero al contar mi historia también cuento un poco la de mi hija, con más pies de plomo. Esto empezó como una terapia narrativa para mí misma, o sea, esto era como un diario que yo me escribía cada noche y de repente, cuando me quise dar cuenta, digo, hostia, esto si le doy un poco la vuelta y me dirijo a un futuro lector, podría ser un libro. Y de repente, las casualidades de la vida conocí a la editora de Planeta y salió. - Porque sí que es verdad que no hay un manual de instrucciones para las madres, pero esas cositas que van contando muchas mamás, nos viene fenomenal al resto. - No, no, totalmente, o sea, yo... Ni es un manual de... ni doy lecciones a nadie, ni nada. Pero tampoco es un libro solo para madres, ni tampoco solo para mujeres. Es un libro para cualquier persona que haya tenido miedos. O para cualquier persona, si no ha tenido miedos, ole. Pero para cualquier persona que haya convivido con alguien que tenga miedos, de cómo lo vivo yo y cómo lo afronto y, sobre todo, cómo lo supero. - ¿Cuál ha sido tu mayor miedo? Porque bien contabas en tus redes sociales, antes de tener a la niña, que te estabas preparando sobre todo, estudiando muchísimo, leyendo mogollón de libros, luego una vez que eres madre...Al final, ha cambiado tus miedos, obviamente, al tener a la niña, ¿no? Pero, ¿cuál ha sido realmente tu mayor miedo antes de tenerla y ahora que la tienes? - Pues el mayor miedo antes, durante y ahora, y creo que es para siempre, es hacer lo mejor posible, estar a la altura de ella, del amor incondicional que ella me da solo con mirarme, entonces, de poder devolvérselo todo. - Oye, ¿cómo es David como papá? Siempre preguntamos a las mamás, pero el papá tiene una misión muy importante y vital, vital. - Totalmente, o sea, la hija es de los dos, pero yo en mi libro y en mis entrevistas hablo de mí, de mi historia, sí. David es una persona muy celosa de su intimidad, no le gusta todo esto. Sí, pero lógic - Es un orgullo decirlo. - No, no, es un orgullo, pero también entendedme que tampoco cuente mucho más porque ni de cómo lo lleva él mezclándolo con el trabajo, ni cosas así, porque eso es su vida y no está bien hablar de eso. Entonces, que estoy cada día más enamorada de él, sí. ¿Y te quería ver un papá? Totalmente, totalmente. Con eso no vale, no hay que profundizar. Ya, bueno, no quieres profundizar tú, pero luego otras de repente, tú eres muy maja, y entonces sí. - Pero os cuesta, es verdad que os cuesta. Cada uno tiene su... bueno, cada uno decide lo que quiere. Sí. Que más allá de las críticas, que al final cualquier persona pública puede recibir, tanto buenas como malas. - ¿Te intentas quedar siempre con lo bueno, aunque te pueda llegar a afectar lo malo? - Sí, porque si no, entonces es que no viviría. Creo que con esto, por ejemplo, del libro, me van a dar por todos los sitios, como siempre, como siempre. Sí, lo van a hacer como siempre. Lo que me va a dar, no se va a leer el libro. Va a coger trocitos, alguien le ha dicho que yo he dicho no sé qué, y entonces ya van a hacer mezclas en vez de leerse el libro. Pero me da igual, porque creo que voy a ayudar a gente, ya no solo a madres, a personas en general. Yo me he quedado bien a gusto. - ¿En qué momento vital te encuentras? - Pues feliz, feliz. Me gustaría dormir un poquito más, pero ya está. Muy feliz, la verdad. Muy enamorada de la vida. - Por curiosidad, me estoy volviendo loca. ¿Se puede decirlo? ¿Qué tengo? No, ¿qué pone ahí? - Namasté. - Ah, vale, es que me estaba volviendo loca intentándole. - Voy con mi namasté y con mis anillos de leche, que es de mi propia leche, y que son de morir de amor. O sea, si alguna vez tenéis que hacer un regalo o algo así, creo que es el regalo de la vida. Esto sí que es una joya. Una joya, y joya a tu niña. - Gracias.

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