Cristina Villanueva, llamativas declaraciones “soy muy mala madre, malísima”

Ficha técnica


Fecha 06/05/2024
Parte 1
Duración 00:04:12
Sonido Totales
Edición Editado
Localización Madrid
Firma Europa Press

Cristina Villanueva nos comenta como vivió la polémica que se generó en redes con el tema del peso: "yo creo que aprendí mucho, ¿no?, y que no he dejado que me mine la moral. Yo no soy modelo, nadie me exige una talla, entonces, bueno, yo creo que estoy estupenda, estoy estupendísima, me siento muy bien, con mucha energía, y eso es lo importante". La periodista nos cuenta cómo ha pasado el día de la madre: "bien, trabajando lo pasé. Soy muy mala madre. Mis hijas lo saben. Una mala madre que hace croquetas congeladas. Me defino como mala madre. Amantísima mala madre". Este tema es en exclusiva Total Cristina Villanueva: - Buenas tardes, Cristina, ¿qué tal? - Muy bien, muy bien. - Hoy toca apoyar la cultura y el cine, ¿no? - Siempre, siempre. Y la diversión y las cosas bien hechas, todo eso. - Estos planes nos vienen de maravilla también, ¿no? - Hombre, pues de vez en cuando, ¿no? Vengo a estresarme a la sala. No sé yo si esto va a ser muy de relax, - ¿eh? Porque, hombre... - Hombre, el planeta de los simios, ahí, muy potente, ¿no? - ¿Te gusta luego, después de las noticias, tus planitos también bonitos? - Otra acción. - La otra acción más cotidiana. - Hombre, una acción muy interesante. Casi que me gusta más esta. Que la otra es más difícil. - Pues ya ha sido el día de la mamá. ¿Qué tal? - Pues bien. Trabajando, que me lo pasé. Hombre, fue domingo y yo trabajo sábado y domingo, así que... Pero bueno, muy bien, muy bien. Es el momento que te esperan con los brazos abiertos. ¡Mamá, mamá, mamá! Y ya, se acabó. Dos microsegundos - Yo creo que seguro que te quieren mucho - No, hombre, todos los días. Eso gusta todos los días. - Es decir, que se dice un día, pero que en realidad la mamá está presente todos los días. - Hombre, claro, es que si no estamos todos los días, mala cosa, la verdad. - ¿Cómo lo definirías tú como mami, como hija? - Yo me defino como mala madre total. - ¿Ah, sí? - Soy muy mala madre. Mis hijas lo saben, me llevo las camisetas, mamá, eso que es, yo ya les explico. Una mala madre que hace croquetas congeladas, por favor. Es que no hay tiempo para otra cosa, yo lo siento mucho. Así que me defino como mala madre. Amantísima mala madre. - ¿Y cómo hija, amantísima mala hija? - Pues como hija tengo mucho que mejorar. Estoy en proceso, yo creo que progresando. Eso que te lo diga mi madre. Ella siempre está muy contenta conmigo, pero alguna quejita seguro que tiene. Tiene mucho trabajo personal por hacer. - Cada día es un aprendizaje constante, tanto como profesional, como persona, como madre, como hijo y como todos. Bendita vida que nos aprende y nos enseña a diario. - Lo bueno es que estamos en el camino, ¿verdad? Oye, la última, vi muchísimo revuelo. También por Twitter, pero muy aplaudido tus palabras cuando se hablaba de coger o perder peso. - Ah, bueno, claro, es que es una esclavitud que te estén todo el día midiendo con la vista. ¿Y tú qué sabes con la vista? La gente tiene una báscula en la vista. Ahí, a ver, si subes, si bajas, mira, al final es una cuestión de uno mismo. Estamos hablando de que tenemos que hacer un camino personal de superación, de mejora personal. También entra un poco ahí el aceptarse, el aceptar tus arrugas, tus años, el aceptar también pues que...no estés igual de activo, ¿no?, que hace 20 años y lo mismo es el peso, ¿no?, no puedes tener el cuerpo de una veinteañera. - ¿A ti te minó la moral o te minó la moral? - Yo creo que aprendí mucho, ¿no?, y que no he dejado que me mine la moral. Yo no soy modelo, nadie me exige una talla, entonces, bueno, yo creo que estoy estupenda, estoy estupendísima, me siento muy bien, con mucha energía, y eso es lo importante. - ¿Y el contarlo te ayudó o por qué dijiste, os lo voy a decir? - Pues no, yo creo que al final te preguntan un poco, porque, bueno, no sé por qué, porque estamos acostumbrados. Sois muy cotillas, exacto, sois muy cotillas, pero sí que es verdad que existe esa esclavitud del peso de la imagen y del cuerpo perfecto, y claro, las periodistas que nos dedicamos a dar noticias, pues es que eso no es nuestra prioridad. Entonces te preguntan por eso y dices, pues esto es un tema, y yo no me había enterado de que esto era un tema, y entonces pues yo digo lo que pienso, vamos, ni más ni menos. - Viva la delgadez, los gorditos, y viva cada uno que esté como quiera que esté. - Bueno, lo importante es sentirse a gusto con uno mismo, y la salud, la salud es lo más importante. - Muchísimas gracias, Cristina, un placer. Este tema es en exclusiva

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