Ficha técnica
José Luis Martínez-Almeida y su prometida, Teresa Urquijo, disfrutan de la Semana Santa en Málaga. El alcalde y su novia están en un balcón en el momento en el que se anuncia la decisión de suspender la salida de la Hermandad de la Paloma, debido al pronóstico de lluvia. Conversan momentos antes de escuchar el rezo. Este tema es en exclusiva. Imágenes de José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo en un balcón vestido con balconera azul. Ambos están acompañados por otras dos personas. Conversan entre ellos. Guardan silencio cuando la persona responsable de la Hermandad del Padre Jesús de la Puente del Cedrón y María Santísima de la Paloma anuncia que se suspende la procesión. Almeida mira hacia abajo y posteriormente hacía el cielo. Comenta algo con Teresa. Ella mueve los labios, por lo que parece que está rezando el Padre Nuestro que rezan todos los presentes. En una ocasión, la prometida del alcalde de Madrid mira hacia el cielo, también. Se escucha la voz de la persona encargada de anunciar que se suspende la procesión por las lluvias: "Vamos, familia, a hacer una oración. Yo creo que es importante que no puedan salir por nuestras calles, nuestros titulares, no debe provocar nuestra tristeza, sino debe provocar también el saber que tenemos que llevarnos en el corazón cada día del año, porque eso es nuestra misión, portarnos cada día del año nuestra vida y nuestras tareas, por eso vamos a rezarles ahora a nuestros titulares, vamos a rezar por todas nuestras familias. Por la paz en el mundo, por la paz en la sociedad, para que el Señor toque los corazones de los que andan enfrentados y divididos, por eso todos juntos vamos a rezar esa oración que el mismo Señor nos enseñó, pidiéndole a nuestro Padre Jesús de la Puente del Cedrón, pues que nos ayude también cada día a travesar con las dificultades y los torrentes de la vida, con lo atravesó, pues desde la fe, desde la esperanza y de saber que Dios nos acompaña con su amor y su misericordia. Pues juntos le decimos todos, Padre Nuestro que estás en el Cielo, santificado. Se a tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo. Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en la tentación y libramos del mal. Amén. Y le rezamos también a María Santísima de la Paloma para que ella con su mirada, con su cercanía y con su amor que tuvo con el Señor...". Este tema es en exclusiva
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