Belén Rueda critica el papel de los hombres actores que son padres

Hiba Abouk habla de sus nuevos proyectos tras su divorcio de Achraf Hakimi: "a mí me llega el proyecto en el momento adecuado de mi vida, me acababa de separar y me apetecía muchísimo trabajar y me llegó este proyecto y me agarré con los dientes a él". Asegura que su trabajo le ayudó a recuperarse: "no, desahogo tampoco, pero sí que ha sido... Esta profesión es muy catártica de todas maneras y te abraza y es un bálsamo. Y, como decirlo, a todo el mundo nos salva el trabajo, ¿no? Pues este trabajo a mí también me salvó". Belén Rueda critica el papel de los hombres actores que son padres: "cuando me llegó este proyecto, que me pasa todo lo contrario, lo que le pasa a ella y que normalmente nos pasa a las mujeres actrices, lo digo aquí, que tienes que dejar de hacer determinadas cosas porque tienes a tus hijos. Es verdad que es una cosa que muchas veces decides tú, pero si tuvieras un apoyo, a lo mejor no tendrías que dejarlo durante tanto tiempo. Y que, sin embargo, yo sigo viendo, por muy avanzados que seamos, que los hombres padres no hacen. Pero bueno. Ahí la dejo. Los actores padres, quiero decir, no los hombres padres, los actores padres, quiero decir". Hiba cuenta cómo hace para conciliar su familia con el trabajo: "yo creo que es duro cuando son, sobre todo, chiquititos y te necesitan. Claro que es duro, es durísimo. Pero se consigue, no es lo más duro, y no soy la primera en hacerlo, ni seré la última, y lo han hecho miles de mujeres antes que yo también. Nada, pues por ahí los tengo, pululando. Pues ya está, ahí está. Sí, claro, te los llevas". Total Hiba Abouk y Belén Rueda: - Bueno, Hiba, Belén, Belén, Hiba, qué maravilla de proyecto, ¿no? - (H) Sí, sí, estamos encantadas de haber rodado esta serie juntas, de por fin, aunque estuvimos en otro proyecto que era Madres juntas, pero no tuvimos ninguna trama, entonces coincidíamos por los pasillos, por maquillaje y peluquería, pero aquí estamos protagonizando las dos esta serie, Eva y Nicole, y ha sido un gustazo. - ¿Qué tal ha sido trabajar una con la otra? - (B) Pues ha sido un regalo, la verdad. Hiba es muy trabajadora, muy concienzuda, pero luego es verdad que la maravilla de todo esto es poder disfrutar después cuando estamos rodando, y lo hemos disfrutado mucho, y además muchas veces antes de ponernos a hacer la secuencia hemos hablado sobre hacia dónde querríamos llevarla, si a lo mejor estaba marcada de una manera, o si habíamos querido que hubiera rivalidad pero que no se notase demasiado, o si queríamos que hubiera un poco de duda pero que la otra no se diera cuenta, quiere decir que es una maravilla cuando puedes con una compañera compartir determinadas cosas que tienen que ver con el resultado final después. - Hablamos de Marbella, ¿no? Esas noches Marbellí, de Olivia Valer, te escuchaba en la rueda de prensa, Hiba, que has tenido que meterte en el personaje, ¿no? Que tú Belén no sé si recordabas esa época, Olivia, por eso que... - (B) ¿Quieres decir que soy más vieja que ella? No, vale, no, fenomenal. Lo he vivido, o sea, no lo he vivido como es Nicole tal cual, pero sí que lo he vivido como espectadora, y a nivel también de toda la información que te llegaba de Marbella de aquel entonces, entonces en mi imaginario sí que lo tengo, pero ha sido fascinante meterse en la piel de esta mujer que está viviendo desde dentro, es que muchas veces parece que las cosas surgen así solitas, o que te han puesto ahí y ahí está, y hay mucho trabajo detrás para poder llegar hasta donde ha llegado. - Tú Hiba, ¿la documentación cómo ha sido? - (H) Muchísimo para el casting, porque no sabía ni quién era Olivia Valer, ni nada. - ¿Te disfrazaste? - (H) Disfrazarme, no, hombre, me caractericé, me puse una peluca, me puse un vestido como los que se ponía ella y así fui al casting. Luego es verdad que cuando leí los guiones vi que en realidad no tenía nada que ver, pero nada que ver, entonces dije, bueno, pues me olvido de Olivia Valer y voy a crear y voy a componer este personaje desde cero, folio en blanco y a escribir y a contar y a crear. Pero claro, me tuve que documentar sobre cómo eran esas noches, que yo no he vivido, que yo no conozco y que eran divertidísimas además. - ¿Sabes que llenaban el papel cuché? - (H) Totalmente, eran muy glamurosas, todo Hollywood veraneando en Marbella, que es aquí al lado, es que era fuerte. - (B) Sí, sí, sí. También es verdad que hay una cosa en esta serie, en Eva y Nicole, que yo creo que va a sorprender al público, porque todos los que tengan una cierta edad, un poco más mayor que tú, poquito, tenemos una imagen que parece que es inamovible, que es quieta, es una foto o es un vídeo corto, entonces nos hacemos una idea sobre determinadas personas a las que no conocemos absolutamente de nada y nos hacemos una idea de lo que sería su vida. Entonces lo maravilloso de Eva y Nicole es que nos metemos dentro de sus vidas y de alguna manera hacemos personas lo que parece que son personajes. - ¿En qué momentos llega el proyecto, en qué momentos encontrabais y qué ha significado para vosotros? - (H) A mí me llega el proyecto en el momento adecuado de mi vida, me acababa de separar y me apetecía muchísimo trabajar y me llegó este proyecto y me agarré con los dientes a él. - ¿Es un desahogo, podemos decir? - (H) No, desahogo tampoco, pero sí que ha sido... esta profesión es muy catártica de todas maneras y te abraza y es un bálsamo. Y, como decirlo, a todo el mundo nos salva el trabajo, ¿no? Pues este trabajo a mí también me salvó. - ¿Tenías muchas ganas de volver a sentirte actriz? - (H) Sí, hombre, siempre me he sentido actriz. Uno cuando es actor se siente actor siempre. Además, yo llevo mucho tiempo trabajando, mucho tiempo estudiando. He sido actriz pues desde que decidí entrar en la Resad, por ejemplo, ¿no? Pero... y no he dejado de serlo. O sea, no ha pasado un año sin que trabaje, aunque haya trabajado menos y me haya dedicado más a mi familia. Y tener hijos, pues, a veces no es compatible con este trabajo. Pero sí que tenía ganas de volver con un proyectazo y con un súper prota y más con una súper compañera, con una serie de mujeres. Me pareció un regalo caído del cielo, vaya. - ¿Y Belén, por ejemplo, en qué momento te llega y qué ha significado para ti? - (B) Pues mira, yo es verdad que estoy en un momento de vida muy diferente en el que el tiempo es mío. Dios mío, estoy diciendo que el tiempo es mío, qué maravilla. Esto tendría... Eso es lo que queremos, pero normalmente no es así, que es a lo que tenemos que aspirar. Y el último trabajo había sido en Barcelona, ya hacía bastantes meses. Y cuando me llegó este proyecto, que me pasa todo lo contrario, lo que le pasa a ella y que normalmente nos pasa a las mujeres actrices, lo digo aquí, que tienes que dejar de hacer determinadas cosas porque tienes a tus hijos. Es verdad que es una cosa que muchas veces decides tú, pero si tuvieras un apoyo, a lo mejor no tendrías que dejarlo durante tanto tiempo. Y que, sin embargo, yo sigo viendo, por muy avanzados que seamos, que los hombres padres no hacen. Pero bueno. - Ahí la dejo, ¿no? - (B) Ahí la dejo. Los actores padres, quiero decir, no los hombres padres, los actores padres, quiero decir. Bueno, entonces a mí me ha llegado en un momento maravilloso en el que, encima es una época para mí muy especial muy especial, porque tenía una edad en la que estaba empezando a vivir, tenía una idea de Marbella. He vuelto a Marbella en otras veces, pero claro, dentro de este contexto digo, madre mía, qué maravilla volver a revivir eso, y más a través de un personaje como el de Nicole, que te puedo asegurar que no tiene nada que ver con lo que viví entonces. - Acabas de decir que está muy bien lo que has dicho. ¿Es duro también esa conciliación maternidad-trabajo-vida-trabajo a la inversa? - (H) Yo creo que es duro cuando son, sobre todo, chiquititos y te necesitan. Claro que es duro, es durísimo. Pero se consigue, no es lo más duro, y no soy la primera en hacerlo, ni seré la última, y lo han hecho miles de mujeres antes que yo también. Nada, pues por ahí los tengo, pululando. Pues ya está, ahí está. Sí, claro, te los llevas. - Perdón, se acerca el 8M. ¿Cómo lo vas a reivindicar? ¿Mujeres, jóvenes? - (B) Pues mira, es que yo estaré trabajando. Estoy con una obra que se llama Salomé, y yo creo que con esa obra se reivindica bastante. Salomé que ha llegado hasta nosotros de una determinada manera, y nosotros la contamos de otra que tiene mucho que ver con la liberación de la mujer. - ¿En tu caso, Hiba? - Yo creo que no hay nada mejor que reivindicarlo trabajando, y siendo independiente, y siendo libre, y teniendo esa actitud no solo el 8 de marzo, sino toda tu vida, y todo el año, y todo el rato. - ¿En qué momento os encontráis? La última. ¿En vuestra vida? - (B) Aquí, en el Festival de Málaga. Felices de volver a reencontrarnos, porque es verdad que cuando haces una serie y terminas, o sea, la hemos terminado hace mucho tiempo, y después de una convivencia muy intensa, de repente, desaparecemos de la vida del otro. Ella y yo nos hemos seguido viendo de vez en cuando, pero volver a reencontrarnos y poder sentarnos y hablar un rato de qué es lo que nos pasa. - (H) Sí, sí, por supuesto. - (B) Es verdad, creas muchos vínculos cuando haces proyectos. Hay personas con las que creas vínculos ya para siempre. - ¿Y tú? Estamos siendo muy buenos hoy, ¿eh? - (H) Yo me encuentro espectacular porque estoy aquí en Málaga estrenando a Eva y Nicole y no hay nada que me pueda hacer más feliz ahora mismo. - Estás feliz, creo que eso nos gusta. - (H) Sí, sí. - Recuperada.