Juan José Padilla defiende el acto de valentía de Juan Ortega de cancelar su boda

Juan José Padilla defiende el acto de valentía de Juan Ortega de cancelar su boda: "por supuesto, no cabe duda. Y en estos tiempos, imagínate decir 'no me caso'. Ha sido un acto de mucha valentía, de un compañero". Espera que el torero recapacite respecto a la decisión: "Juan es una persona de un entorno muy equilibrado y algo le ha debido pasar por su mente para decir no. Si recapacite, que sea para bien y que sea para que llore de nuevo, de alegría. Ojalá". Desmiente haber sido invitado a la boda: "Precisamente no y tengo que hacerlo públicamente porque me han llamado todos los medios porque soy de Jerez, ella es de Jerez, pero no estaba invitado". Dedica unas bonitas palabras al torero en estos momentos tan delicados: "Torero conmensurado, una gran clase y nos ha sorprendido muchísimo a todo el mundo. No pensábamos que podía suceder algo tan fuerte. Algo debe haber, por su cabeza ha debido pasar algo pero seguramente nada agradable y creo que tampoco lo estará pasando nada bien". Juan José Padilla habla de lo enamorado que está de su mujer y de su gran relación: "llevo 24 años casado con mi mujer, que tuve una circunstancia para nada parecida pero casi suspendo mi boda, por una cornada que tuve y no me recuperaba. Casi, un mes antes, podía cancelar todo. Sin embargo, yo iba radiando en ese coche de caballos, llorando de alegría, y bueno, hoy gracias a Dios, después de 24 años, tengo dos niños maravillosos y una vida súper feliz". Total Juan José Padilla: - Felices fiestas, en primer lugar. - Muchas gracias. - ¿Cómo se plantean las navidades? - Se plantean muy feliz, con los niños muy grandes. Lo celebraremos con mis hijos, con mis padres, con mi familia, con mis hermanos y disfrutando de estos ratos tan agradables como este día tan importante para la Fundación López Mariscal. - Siempre estás apoyando a José Luis, ¿Verdad? - Como amigo, desde hace más de veinte años. Luego, como admirador, porque no admiro a una persona que abre tanto frente y ayuda a tantos necesitados. Aquí, por ejemplo, mayor prueba que un día como este, la convocatoria tan importante de tantos conocidos, tantos famosos, es por y para ayudar a esa fundación y ayudar a s alabo tan importante que está haciendo con su trabajo. - Le tenemos que preguntar por su compañero y amigo. Hace un par de semanas que aconteció en Jerez por Juan Ortega. No sé qué le parece, si sabe algo de él, si es cierto que es amigo suyo y ha podido preguntarle. - No hemos tenido contacto. Yo he tenido contacto con él prácticamente como torero, como compañero. Torero conmensurado, una gran clase y nos ha sorprendido muchísimo a todo el mundo. No pensábamos que podía suceder algo tan fuerte. Algo debe haber, por su cabeza ha debido pasar algo pero seguramente nada agradable y creo que tampoco lo estará pasando nada bien. Seguramente, ni él ni ella tampoco. Imagino que una situación muy difícil para su familia y para él. - ¿Era usted uno de los invitados a la boda? - Precisamente no y tengo que hacerlo públicamente porque me han llamado todos los medios porque soy de Jerez, ella es de Jerez, pero no estaba invitado. En esa lista donde habíamos tantos toreros que ha aparecido, no habíamos ninguno prácticamente de esos invitados. No porque tuviéramos mala relación, todo lo contrario. - Porque sois más compañeros de plaza pero no es amistad. - Efectivamente. Además, Juan Ortega es de una generación anterior a la mía. Prácticamente cuando ya me había retirado, estaba empezando él. Yo soy de una generación, soy un poquito mayor aunque no lo parezca. - Yo decía que a lo mejor para la siguiente, que se reconcilien y esa boda se lleve a cabo. Como se está contando de todo. - Pues sí, sería la verdad, porque sea de las dos partes, que sea para bien. Igual que si ha sido para bien separarse, esto es una cosa tan respetable porque en definitiva, es para toda la vida. Yo, por ejemplo, solo que yo puedo decir como experiencia que llevo 24 años casado con mi mujer, que tuve una circunstancia para nada parecida pero casi suspendo mi boda, por una cornada que tuve y no me recuperaba. Casi, un mes antes, podía cancelar todo. Sin embargo, yo iba radiando en ese coche de caballos, llorando de alegría, y bueno, hoy gracias a Dios, después de 24 años, tengo dos niños maravillosos y una vida súper feliz. - Qué bonito recordarlo así y que lo pueda contar con esa alegría, que le acompaña a todos lados. - Ojalá, ojalá. De estos micrófonos, a Juan Ortega, esas lágrimas que desgraciadamente ha supuesto para él porque ha sido muy doloroso decir no a esta boda, ojalá se pueda recapacitar. - Eso también es un acto de valentía, ¿no? - Por supuesto, no cabe duda. Y en estos tiempos, imagínate decir 'no me caso'. Ha sido un acto de mucha valentía, de un compañero la verdad que, en definitiva, a mí desde luego, vuelvo repetirte: Juan es una persona de un entorno muy equilibrado y algo le ha debido pasar por su mente para decir no. Si recapacite, que sea para bien y que sea para que llore de nuevo, de alegría. Ojalá. - Ojalá que sí, muy amable.