Para acceder a este vídeo, solicite acceso al departamento comercial.

Foto del vídeo

Fabiola Martínez encantada de ser madrina de la campaña de Dodot enfocada a los bebés prematuros

Ficha técnica


Fecha 08/11/2018
Parte 2
Duración 00:18:56
Sonido Totales
Edición Editado
Localización Madrid

Fabiola Martínez encantada de ser la nueva embajadora del proyecto ‘Pequeños Luchadores’ de Dodot, que ha lanzado una nueva línea de pañales enfocada a bebés prematuros: “lo que más me ha motivado a implicarme es que son donados a todos los hospitales de España. Es un compromiso social que una marca mundial se implique de esta manera”. Asegura, este nuevo proyecto ayudará a las madres a superar esta situación y a recordar que hay más personas que las comprenden en su lucha: “crear un pañal tan chiquitito que parece que no es importante pero que para muchas madres es importantísimo. Es toda la diferencia”. Comenta, es una situación muy dura ya que un bebé prematuro suele nacer también con algunas dificultades: “normalmente los bebés prematuros suelen nacer con ciertas dificultades, incluso cuando son pasajeras, es un momento para las madres muy crítico”. Recuerda el parto prematuro de su hijo Kike y dice, es muy duro: “en vez de ver un bebé de 3 o 4 kilos ves una cosita de treinta centímetros, de 800 gramos. Es muy duro”. En ese momento prefirió focalizarse en su hijo más que en cómo se sentía ella y cree ese fue su salvavidas para poder superar la situación: “quizás fue mi salvavidas no pensar tanto en cómo me sentía yo sino más bien en que mi hijo fuera lo suficientemente fuerte como para superar eso, en ese momento ni siquiera piensas en las secuelas”. Cuando nació Kike, Fabiola Martínez rezaba para que su hijo sobreviviera: “yo soy creyente y rezaba y decía: “déjamelo, yo lo quiero disfrutar un poco””. Hace unas semanas Kike Osborne se sometió a una operación para fortalecer los músculos de las piernas y facilitar la bipedestación y Fabiola comenta que hay días duros pero que cuando llega la recompensa merece la pena: “hay días complicados, días duros que parece que no llega la recompensa pero cuando llega es gloria bendita” “hoy le ponían de pie con las escayolas y la semana que viene se las quitan”. Reconoce su hijo mantiene una actitud positiva y luchadora frente a las adversidades: “él quiere, está como loco, él no para, no deja de mover las piernas. El querer es poder y creo que mientras esté peleando lo va a conseguir. Y si le ayudamos, más todavía”. Fabiola no cree que la experiencia le haya hecho ser más fuerte, sino que ha aprendido a utilizar mecanismos para sobrellevar la situación: “encuentras mecanismos para sobreponerte ante una situación puntual”. Confiesa, hay momentos en que la situación la supera pero ahí es cuando recuerda que lo que importa es Kike y su lucha merece la pena y para ello tienen que apoyarle y estar al pie del cañón: “hay veces que me puede el ver a mi hijo que se esfuerza y que a lo mejor no consigue una cosa es algo que me mata. Mi mecanismo siempre es el mismo, me digo: esto no va de mí, si él está luchando, eso es con lo que me tengo que quedar. El tema no soy yo, de ahí me agarro, saco más fuerzas, me repongo y hay que estar la pie del cañón”. Fabiola ha confesado que sigue chocando mucho con Eugenia, ya que ambas tienen un fuerte carácter, pero que se respetan mucho y que nunca discuten para hacerse daño: “al principio y todavía. Nada es color de rosa, tenemos mucho carácter”. “Nunca han sido discusiones directas de hacernos daño. Todos nos respetamos, que es la base fundamental”. A pesar de eso, Fabiola fue un gran apoyo para la hija de su marido cuando esta perdió a una de sus mellizas prematuras. Cuenta que fue un momento muy duro para toda la familia y que admira a Eugenia por haber sido tan valiente: “fue un momento muy duro para todos porque esperas dos niñas con mucha ilusión y bueno, fue complicado”. “Ella lo ha hecho muy bien. Ha sabido convivir con ello, que no significa que a veces no te duela, pero ha sido muy valiente”. Fabiola espera poder reunir a todas las familias estas navidades para celebrar la tradición típica venezolana de dar la bienvenida al espíritu de la navidad: “una tradición venezolana, que es darle la bienvenida al espíritu de la navidad el 21 de diciembre. Yo creo que lo voy a hacer este año, que como no es ni 24 ni 25 igual consigo juntarnos todos”. La venezolana se muestra muy unida a la familia de Bertín Osborne, de quien dice que se encuentra muy bien a pesar de sus momentos más débiles de salud: “él hace mucho deporte y esto le ayuda mucho. En él no es por los excesos, es hereditario. Pero él está bien”. Desde su experiencia teniendo un parto prematuro, anima a todas las madres que pasan por lo mismo a ser valientes: “que pasa, que no se agobien. Es duro, es difícil verlos así, pero al final crecen y se convierten en niños maravillosos”. Total Fabiola Martínez: - Embajadora de Dodot. - Sí, un proyecto precioso y único, hasta ahora no se había hecho nada parecido. Enhorabuena a Dodot por esta iniciativa de crear un pañal tan chiquitito que parece que no es importante pero que para muchas madres es importantísimo. Es toda la diferencia. - Cuéntanos las ventajas de este pañal. - Aparte de lo emocional que puede ser para una madre tener un hijo prematuro, en una incubadora, con un ambiente hostil con tantos cables. Que tenga la posibilidad de usar un pañal como otro bebé eso dice mucho. Hasta ahora, los pañales que se usaban eran muy grandes y no se podían manipular bien. Las enfermeras hacen malabares para cortar los pañales para que les valiesen. Eso ya no hay que hacerlo. Lo que más me ha motivado a implicarme es que son donados a todos los hospitales de España. Es un compromiso social que una marca mundial se implique de esta manera. - Y tú también ayudas a darlo a conocer. - claro, aunque Dodot es más conocido que yo seguro. Nosotros aportamos lo que podemos no tanto la cara, sino la experiencia personal, no hablamos de oídas. - ¿Cómo fue tu experiencia? - Fue una experiencia que seguramente muchas madres que lo escuchen es algo que se repite. Cuando estás embarazada ya piensas cómo va a ser la habitación, los colores, etc y cuando el bebé es prematuro todo eso se cambia. Normalmente los bebés prematuros suelen nacer con ciertas dificultades, incluso cuando son pasajeras, es un momento para las madres muy crítico. En vez de ver un bebé de 3 o 4 kilos ves una cosita de treinta centímetros, de 800 gramos. Es muy duro. Yo en ese momento quizás fue mi salvavidas no pensar tanto en cómo me sentía yo sino más bien en que mi hijo fuera lo suficientemente fuerte como para superar eso, en ese momento ni siquiera piensas en las secuelas. Yo soy creyente y rezaba y decía: “déjamelo, yo lo quiero disfrutar un poco”. Y es muy duro, pero todo pasa, gracias a dios, él ahora está fenomenal. Es súper luchador, lo demostró desde que nació y cada día se esfuerza. - Cada día sorprende más. - Sí, sí. Hay días complicados, días duros que parece que no llega la recompensa pero cuando llega es gloria bendita. - ¿Cómo está llevando lo de la operación? - La operación ha sido no complicada en sí, porque no era una operación a corazón abierto, pero eran 8h de operación, 19 incisiones. Le operaron la cadera derecha, las dos rodillas, y los dos tobillos y luego algunos músculos para facilitar la bipedestación. Quizás no va a ser como nosotros pero lo suficiente como para que pueda conseguirlo. - ¿Cómo está siendo la rehabilitación? - Ya ha pasado la primera fase que era inmovilidad total, hemos empezado con movilización para que fuese recuperando elasticidad muscular y que todo se vaya poniendo en su sitio. Hoy le ponían de pie con las escayolas y la semana que viene se las quita. - ¿Cómo le ves de ánimos? - Él quiere, está como loco, él no para, no deja de mover las piernas. El querer es poder y creo que mientras esté peleando lo va a conseguir. Y si le ayudamos, más todavía. - ¿A ti esto te ha hecho más fuerte? - Yo creo que no es una cosa que sucede y ya está, no es que te haces más fuerte y eres fuerte. Cero que encuentras mecanismos para sobreponerte ante una situación puntual. Yo he tenido muchas oportunidades para desarrollar este mecanismo pero tengo muchos momentos de debilidad, de fragilidad. Hay veces que me puede el ver a mi hijo que se esfuerza y que a lo mejor no consigue una cosa es algo que me mata. Mi mecanismo siempre es el mismo, me digo: esto no va de mí, si él está luchando, eso es con lo que me tengo que quedar. El tema no soy yo, de ahí me agarro, saco más fuerzas, me repongo y hay que estar la pie del cañón. - Y también la ayuda de Bertín, de Carlos, de las niñas. - Todo suma, yo también tengo a mi familia que me ayuda un montón. Todo suma pero el protagonista es él. - Nos llama mucho la atención lo bien que te llevas con Eugenia. Ella nos ha comentado que fuiste un gran apoyo cuando lo de Leticia. - Sí, fue un momento muy duro para todos porque esperas dos niñas con mucha ilusión y bueno, fue complicado. Yo dentro de mi experiencia, ellos me consultaban cosas, pero es más la parte emocional de superarlo. Para mí ella ha sido mucho más fuerte de lo que nos pudimos imaginar. Porque yo he pasado por lo mismo, sí, pero ella perdió a su niña y eso lo llevas toda tu vida. Cuando Bertín y yo hablábamos del tema nos producía ternura, pero ella lo ha hecho muy bien. Ha sabido convivir con ello, que no significa que a veces no te duela, pero ha sido muy valiente. Un hijo no se te olvida. No es que sea una cosa que se te pasa, lo has perdido hasta que te mueras. Y ella tiene a Sandra, que por un lado de la da satisfacción pero por el otro le recuerda a Leticia. - Por ponerle humor, nos ha contado que ahora se lleva fenomenal contigo pero que al principio… - Al principio y todavía. Nada es color de rosa, tenemos mucho carácter. Somos muy similares de forma de ser. Cuando sacamos temas, que son chorradas, discutimos. Pero todos. Tenemos mucha fuerza, pero eso es guay, al final nada es lineal. - Una bomba en una reunión familiar. - Nunca han sido discusiones directas de hacernos daño. Todos nos respetamos, que es la base fundamental, y eso ha solidificado la relación. A pesar de tener diferencias nos respetamos. A mí no me gusta meterme en la vida de los demás, hay gente que me dice que soy ejemplo pero yo no me veo así. La gente tiene que ser libre de decidir y de hacer. - Te tengo que preguntar por Carlos, vaya showman que tenéis en casa. - Sí, sí. Es todo autodidacta. - Apunta maneras. - Le gusta, le divierte. Ha visto que tiene tirón y llama la atención. - ¿te da miedo que se quiera dedicar a esto? - No me da miedo siempre y cuando siempre estudie y tenga otras perspectivas, que vivir de la música es difícil. - Lo ha vivido Bertín. - Y porque vivimos con los pies en la tierra. Hay mucho talento en España y no siempre se tiene suerte. Así que qué se prepare y estudie. Si es lo que quiere hacer tendrá nuestro apoyo, pero nuestro deber es formarle. - ¿cómo está Bertín de lo de la gota? - Él hace mucho deporte y esto le ayuda mucho. En él no es por los excesos, es hereditario. Pero él está bien, no para. Se cuida mucho. Tiene momentos más difíciles de salud porque estos brotes llegan de repente, a veces te los produce el estrés. - ¿Las navidades cómo las vais a pasar en familia? - Las navidades este año yo creo que tenemos más posibilidades, porque como estamos en Sevilla podemos encajarnos las familias. Pero yo creo que sí. Se me ha ocurrido hacer una cosa, una tradición venezolana, que es darle la bienvenida al espíritu de la navidad el 21 de diciembre. Se hace un ritual muy bonito donde se reúne la familia y escriben en un papel los propósitos del nuevo año. Yo creo que lo voy a hacer este año, que como no es ni 24 ni 25 igual consigo juntarnos todos. - ¿Has conseguido felicitar a Rosanna y Bisbal por el embarazo? - A Bisbal sí que le conozco personalmente, hemos coincidido en alguna ocasión. Pero enhorabuena a todas las madres que están viviendo este momento. Es que yo a ella no la conozco, pero espero que vaya fenomenal. - ¿qué consejo les darías a esas mamás con bebés prematuros? - Que pasa, que no se agobien. Es duro, es difícil verlos así, pero al final crecen y se convierten en niños maravillosos. El momento pasa gracias a dios. Que los disfruten también. Ellos en ese momento lo que necesitan es sentir a sus mamis y a sus papis cerca. Yo recuerdo una vez con Kike de una operación en la cabeza y las enfermeras me dijeron que me fuera a casa que él estaba sedado, él era bebé, y yo dije que me quedaba. Él subió, dormidito, y entonces entré le toqué y abrió los ojos y se volvió a quedar dormido. Esa conexión que solo entendemos las madres es lo que hace que ellos luchen. Para ellos el mundo es violento, vienen de estar calentitos con mami a que todo sea muy violento. Entonces que estén con ellos, que les toquen aunque las enfermeras digan que no. - Muchas gracias. ESTE TEMA ES EN EXCLUSIVA

Partes


Relacionados