Mala tarde para el diestro José Ortega Cano en Pozuelo

MALA TARDE PARA ORTEGA CANO EN POZUELO. EL DIESTRO FUE CONSIDERADO COMO UN TORERO QUE NO SE ARRIMA POR EL PÚBLICO. ORTEGA NO OBTUVO NINGÚN TROFEO NI NINGUN REVOLCÓN LO QUE LE PROVOCO UN GRAN ENFADO, PERO ESTUVO APOYADO POR SU HERMANO PACO, SU CUÑADA Y SU SOBRINA EN TODO MOMENTO. TORERO QUE NO SE ARRIMA FUE EL GRITO QUE LE DEDICÓ EL TENDIDO DE POZUELO A JOSÉ ORTEGA CANO. EL DIESTRO NO TUVO UNA BUENA TARDE EN LA QUE MATÓ CON DIFICULTAD Y EL TORO LE ARRANCÓ LA MULETA EN DIVERSAS OCASIONES, LO QUE PROVOCÓ UN GRAN ENFADO EN ORTEGA, QUIEN POR SUERTE NO SUFRIÓ NINGUN REVOLCÓN. EN EL TENDIDO, SU HERMANO PACO OBSEVABA ATENTAMENTE LA FAENA ACOMPAÑADO DE SU MUJER Y SU HIJA, QUIENES TAMBIEN QUISIERON APOYAR A ORTEGA CANO. SE LIDIARON SEIS TOROS DE JOSÉ LUIS PEREDA EN LA PLAZA DE TOROS DE LAS AMÉRICAS EN POZUELO DE ALARCÓN PARA LOS DIESTROS JOSÉ ORTEGA CANO, DAVID FANDILLA 'EL FANDI' Y CÉSAR JIMÉNEZ, ENTRE LOS QUE DESTACARON DOS EJEMPLARES, EL TERCERO Y EL QUINTO. EL PRIMERO FUE MASACRADO EN VARAS Y, TRAS UN PÉSIMO TERCIO DE BANDERILLAS, A ORTEGA CANO NO LE QUEDÓ OTRA QUE ABREVIAR. NI SIQUIERA LO INTENTÓ Y HUBO PITOS TRAS UNA MALA FAENA. TAMPOCO PUDO HACERSE CON EL CUARTO, TORO FLOJO, QUE ACABÓ EXHAUSTO. TRAS UN PINCHAZO, MEDIA ESTOCADA TENDIDA Y SILENCIO. MEJOR ESTUVO 'EL FANDI', QUIEN PUSO TRES BUENOS PARES DE BANDERILLAS, EL ÚLTIMO DE ELLOS A UNA MANO. TRAS BRINDARLE EL TORO A LA PLAZA, LE SACÓ BUENAS SERIES CON LA DERECHA Y A MEDIA ALTURA. PINCHAZO, BUENA ESTOCADA Y PRIMERA OREJA DE LA TARDE. RAZA TENÍA EL QUINTO, AL QUE 'EL FANDI' CITABA DE LEJOS Y EN LOS MEDIOS CON LA MULETA. CULMINÓ UNA BUENA FAENA EN SU CONJUNTO Y A PESAR DE UNA ESTOCADA BAJA, SEGUNDA OREJA PARA EL DIESTRO. CÉSAR JIMÉNEZ, POR SU PARTE, TUVO UNA ACTUACIÓN MUY DESTACADA, MOSTRÁNDOSE MUY TORERO CON EL CAPOTE. EL TORO, FALTO DE CLASE, CABECEÓ PERO EL DIESTRO LE CONSIGUIÓ SACAR BUENAS SERIES CON AMBAS MANOS. TRAS UN PINCHAZO, ESTOCADA EN TODO LO ALTO QUE LE OTORGÓ SU PRIMERA OREJA DE LA TARDE. FIRME Y SEGURO SE MOSTRÓ JIMÉNEZ CON EL SEXTO, UN TORO BRONCO PERO QUE NO IBA DEL TODO MAL POR EL PITÓN IZQUIERDO. LA FAENA, MUY LARGA, CULMINÓ CON UNA BUENA ESTOCADA Y DESCABELLO. CÉSAR JIMÉNEZ CORTABA ENTONCES LA OREJA QUE LE ABRÍA LA PUERTA GRANDE EN POZUELO.